La flota estará amarrada toda la semana y no habrá ninguna subasta

En la sala de subastas de la Cofradía de Santoña reina un inusual silencio al no haber ninguna especie por la que pujar. Esta falta de mercancía se hará notar en los mostradores de las pescaderías pero, en ningún caso, habrá desabastecimiento. «No va a haber escasez porque los compradores saben los tiempos que dan. Aquí, por ejemplo, adquirieron el lunes las 500 cajas de merluza que se subastaron y si no lo hay, lo traerán de donde haga falta». Lo que sí es previsible es que suban los precios en los mercados ante el poco pescado fresco de la costa. «Cuando hay escasez los precios tiran para arriba y a la inversa».

El presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Cantabria, César Nates, explica que con la alerta roja los barcos artesanales no están saliendo a la mar, pero también incide en que el mes de enero «prácticamente el 90% de la flota está parada preparando las embarcaciones y realizando papeleo» de cara al arranque de las costeras de verdel y del bocarte en marzo.

En esta época, dice, es la Cofradía de Santoña «la única que mantiene el pulso y realiza algunas ventas. En general, hay poco pescado fresco y ya con el temporal pues no habrá nada». No obstante, las pescaderías se nutren en el mercado mayorista de suministro capturado en otras zonas.