
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El control de población del lobo en la región ya tiene números y fechas. A partir de hoy y hasta el 31 de julio de ... 2020, el Gobierno de Cantabria permitirá la caza de esta especie hasta cumplir con el 20% de los ejemplares que hay censados en el territorio regional o, dicho de otra forma, hasta capturar 34 de los 171 cánidos salvajes registrados. Este es el cupo de extracción publicado ayer en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC) referente a la temporada 2019-2020, en aplicación del Plan de Gestión del Lobo en Cantabria aprobado en abril por la Consejería de Desarrollo Rural.
Carlos Sánchez | Fundación Naturaleza y Hombre
Importante: las asignación señalada «puede aumentar» si, por ejemplo, existe una oleada de ataques o existe una causa justificada, según informó ayer el jefe de Servicio de Conservación de la Naturaleza, Ángel Serdio. Y otro apunte fundamental: la cuota de capturas podrá ser realizada mediante la actividad cinegética ordinaria durante las batidas de jabalí, o bien a través de actuaciones realizadas por el propio personal de la Dirección General de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático. A los primeros corresponde 28 de los 34 ejemplares contemplados en la asignación, y que podrán ser cazados tanto en la Reserva de Caza del Saja como en los cotos que el departamento indica en su resolución (los de Lamasón, Peñarrubia, Valdeolea, Campoo de Yuso, Valderredible, Toranzo, Villacarriedo, Villafufre y Vega de Pas) para gestionar las 23 manadas que tiene registradas el Ejecutivo.
«Nos parece una población muy alta», sostiene Carlos Sánchez, presidente de la Fundación Naturaleza y Hombre, y que ayer manifestó sus diferencias con el documento del Gobierno. «Siempre lo hemos dicho. Estamos a favor de los controles, pero creemos que debería hacerlos la Administración, nunca a través de la actividad cinegética», exigió. En esa línea, Sánchez abogó por batidas «de bisturí, al detalle» y sobre todo, actuar inmediatamente después de que se produzcan los ataques, «cuando son más efectivas».
Ignacio Valle | Federación Cántabra de Caza
También se mostró partidario de esta estrategia su homólogo en la Fundación Oso Pardo, Guillermo Palomero, que identificó «como un paso atrás» la asignación del capturas de la próxima temporada: «La intención del Plan debe ser disminuir los daños, y para ello tienen que hacerse de forma rigurosa y muy técnica». A este respecto, el presidente de la organización aseguró que la caza deportiva «no reduce los daños», un hecho que para él queda de manifiesto en las palabras del Gobierno, en cuya nota «asegura que la caza se ha mantenido estos años, y sin embargo no han parado de aumentar». A pesar de todo, Palomero trasladó su apoyo a los ganaderos damnificados, primero, y su relación de colaboración con el sector cinegético.
Gaspar Anabitarte | UGAM
Uno de ellos, y además presidente de la Federación de Caza es Ignacio Valle, quien agradeció, «al menos», la publicación de la normativa el pasado mes de abril. «Se ha hecho un plan, que es lo importante, y eso nos da una seguridad jurídica para capturar bajo una legalidad que antes no teníamos. Sin él, en cuatro días tendríamos encima a todos los grupos ecologistas», manifestó antes de detenerse en el cupo de lobos establecido por la Administración. Ayer expresó: «De momento, el 20 por ciento puede estar bien para controlar las población».
Guillermo Palomero | Fundación Oso Pardo
No está tan de acuerdo Gaspar Anabitarte, presidente de la Unión de Ganaderos y Agricultores Montañeses (UGAM), pues se mostró «tajantemente en desacuerdo» con los 34 lobos contemplados en la asignación. Para él, «se podría hablar de un 50 por ciento autorizado tranquilamente». Pero tampoco quiso dar lugar a equívocos. Lo que quiere el representante ganadero es «que se eliminen lobos hasta que se acaben los daños, no matarlos porque sí».
Ángel Serdio | Conservación de la Naturaleza
En medio de todas las sensibilidades -de éstas y de más organizaciones reunidas durante las negociaciones-, uno de los responsables públicos encargado de encontrar un punto medio ha sido Ángel Serdio. «El porcentaje se ha establecido con criterios técnicos. Entiendo que a unos les parezca poco y a otros demasiado, pero es adecuado», sostuvo, antes de mostrar la mano tendida del Ejecutivo a todas las partes en esta cuestión, «en busca de un consenso», y también en materia de daños, «que ahora paga el Gobierno».
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