El Gobierno ya busca empresas para diseñar la reforma del claustro oeste de Comillas

El Ejecutivo acaba de sacar a concurso por 265.000 euros la redacción de ese plan de reforma, y las firmas interesadas tienen de plazo hasta el próximo 30 de septiembre para presentar sus ofertas. Deberán incluir, además, un cronograma para que las obras se pueda dividir en tres fases, de manera que se puedan contratar y ejecutar de manera independiente, así como permitir las visitas de forma paulatina.

Como se puede leer en los pliegos publicados por el Gobierno, el principal objetivo de la intervención es recuperar «la integridad material y formal de las fachadas y de los elementos estructurales» del claustro oeste, así como «su consolidación y protección» para garantizar que no se produzca otro colapso como el de 2012 o peor aún.

El bipartito llegó a calcular el año pasado que el coste total de las obras podría alcanzar los 16 millones de euros, financiados por el Gobierno cántabro con ayuda del Estado. Una inversión cuantiosa que incluirá, además, el desmontaje de las cubiertas y los forjados que queden en pie, eliminando todos los elementos estructurales que sean de madera, y consolidando y protegiendo el resto de la estructura. En estos trabajos se deberá incluir la retirada y demolición de los estabilizadores actuales que evitan derrumbes debido al estado en el que quedó este ala tras el incidente de hace doce años. Se pretende, también, ampliar la galería subterránea de instalaciones, y dejar preparada la conexión con el futuro sótano del Claustro. Además, las obras deberán respetar la estética exterior del edificio, tanto en volumetría como en el acabado de los materiales.

La propuesta planteará, además, unos recorridos visitables que muestren los elementos de mayor interés, y desde los cuales se perciba la totalidad del espacio desde los puntos más singulares, con un acceso independiente desde el exterior del edificio y con conexión desde el interior del cuerpo central ya rehabilitado. Hay que tener en cuenta que alrededor de 15.000 personas participan anualmente en las visitas guiadas.

Tras 16 meses de trabajo y 1,2 millones de euros, el año pasado concluyó la restauración de los tapices y la sillería del Seminario Mayor, devolviéndolos al estado original con el que los jesuitas celebraron las primeras misas allí a finales del siglo XIX. También se reformó la que fue una de las joyas del templo, su órgano. Una de las pocas piezas de valor que dejaron en el edificio -eso sí, totalmente desguazada- los jesuitas cuando trasladaron la Universidad Pontificia de Comillas a Madrid. Tras su recuperación, ya ha vuelto a sonar.

En las fases anteriores, finalizadas en 2017, los trabajos se centraron en consolidar la estructura de la nave y su cubierta. En total, desde el año 2007 y hasta la fecha se han invertido alrededor de 30 millones de euros en la rehabilitación del Seminario Mayor de Comillas, adquirido en 2005 a Caja Cantabria por el Gobierno regional.