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Las políticas de vivienda serán también una prioridad para el Gobierno de Cantabria. Lo dejó claro ayer la presidenta, María José Sáenz de Buruaga (PP), que anunció la futura construcción de 171 nuevos pisos de titularidad pública que se pondrán en el mercado en ... régimen de «alquiler con precios asequibles». Lo que no detalló fue cómo de asequible será ese alquiler, pero garantizó con ello que el Ejecutivo autonómico recupera la senda de la promoción de vivienda pública «después de ocho años en que no se había hecho nada».
Serán edificaciones que se pondrán en marcha contra reloj porque pretenden aprovechar fondos europeos dedicados a tal fin «que de lo contrario se hubieran perdido». Hasta 13 millones llegarán de Europa «y por cada uno que llegue, el Gobierno de Cantabria pondrá otro», matizó Buruaga. Serán, por tanto, 26 millones para la construcción de las 171 viviendas que se repartirán por siete municipios de la región que se encuentran entre los más necesitados de este stock ante la creciente demanda.
«Hemos proyectado todo esto en ayuntamientos de cualquier signo político. No hemos hecho distinciones en ese sentido, algo que concuerda con nuestro compromiso de trabajar sin sectarismos y para absolutamente todos los ciudadanos cántabros», aseguró Buruaga.
16 millones de euros
costará levantar las 141 viviendas de titularidad pública.
El único problema es que Europa pone una fecha límite para tener levantadas estas viviendas: marzo de 2026. «Por eso es urgente que nos pongamos a trabajar lo más rápido posible. De hecho hace tiempo que lo estamos haciendo, porque nuestra intención es aprovechar esos fondos europeos».
La fase más avanzada es la de Santillana del Mar, donde se construirán ocho viviendas en una parcela de titularidad municipal que ya ha sido cedida a Gesvicán, la empresa pública que se encargará de levantar todas las promociones: «Estamos pendientes de la licencia municipal para desarrollar el proyecto de ejecución y poder comenzar ya con las obras».
Polanco es otro municipio donde se construirán cuarenta nuevas viviendas públicas y también el lugar elegido ayer por Buruaga para presentar este plan junto a la alcaldesa de la localidad, Rosa Díaz; el consejero de Fomento, Roberto Media; y Carlos Montes, director General de Vivienda, entre otros.
La mayor promoción -en número- está prevista para Reinosa, donde se han proyectado hasta 58 viviendas en terrenos que son propiedad de Gesvicán. A Torrelavega le tocarán 27 pisos, «quince que serán de nueva construcción en una parcela que le pertenece al Gobierno de Cantabria y que está en el Zapatón, y otras doce que surgirán de la rehabilitación de un edificio municipal en el barrio de La Inmobiliaria», concretó Buruaga.
Santoña será otro de los ayuntamientos beneficiados de esta medida. Allí se han planeado 28 viviendas en parcelas de titularidad municipal. Otros siete pisos se levantarán en Liencres (Piélagos) y los tres restantes, hasta llegar a los 171 totales, están proyectados en Orejo (Marina de Cudeyo).
María José Sáenz de Buruaga
Presidenta de Cantabria
«En todos los casos redactaremos los proyectos de ejecución y comenzaremos las obras a través de Gesvicán, que va a empezar a cumplir de nuevo el cometido que era el original, construir vivienda pública», señaló la presidenta. «Este es un compromiso para atender a las necesidades de todos, sobre todo de los más jóvenes y también de los colectivos más necesitados, que se verá reforzado con otras medidas, encaminadas todas ellas a que el acceso a la vivienda sea algo asequible para todos», añadió Buruaga.
A esta iniciativa se sumará el refuerzo de 10 millones de euros en el Presupuesto del año próximo «con los que queremos alimentar varios programas de ayuda al alquiler de viviendas», dijo la presidenta, que también informó de que se están diseñando planes para la construcción de viviendas públicas para adquirir en régimen de propiedad, y otros para la adquisición de inmuebles que todavía le pertenecen a la Sareb (la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, popularmente conocida como 'banco malo').
La revisión fiscal del Gobierno cántabro también irá encaminada a apoyar todas estas iniciativas y, por eso, Buruaga anunció que se reducirá de forma importante el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para la compra de primeras viviendas. «Podría bajar del 10% al 4% incluso para los más jóvenes», afirmó la jefa de Ejecutivo, que además aseguró que la nueva Ley de Vivienda garantizará también la lucha contra el fenómeno de la okupación. «No podemos tolerar que los pequeños propietarios tengan miedo porque está comprobado que eso reduce la oferta y, con ello, viene la subida de precios», concluyó la presidenta.
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