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Los cántabros que residen en el extranjero, tanto en otras comunidades autónomas del territorio nacional como fuera de España, tendrán a su disposición ayudas de entre 600 y 1.000 euros destinadas a sufragar los gastos de desplazamiento, alojamiento y manutención para «reencontrarse con su ... tierra».
El Gobierno de Cantabria ha publicado este viernes, 26 de agosto, en el Boletín oficial de Cantabria (BOC) las bases de las subvenciones, que cuentan con un presupuesto total de 45.000 euros para «facilitar y promover el derecho de retorno a la comunidad autónoma de las personas cántabras en el exterior». Ahora bien, ese encuentro con la tierruca deberá llevarse a cabo en cualquiera de los 39 municipios cántabros en riesgo de desploblación, como Anievas, Bárcena de Pie de Concha, Cabuérniga, Lamasón, Peñarrubia, Rasines, Soba, Tresviso o Valderredible, entre otros.
Esta orden presume de la misma filosofía que el antiguo 'Plan Murria' (nomenclatura de raigambre cántabra que hace referencia a la añoranza por el terruño) por el que se buscaba favorecer el retorno en cumplimiento del mandato de la ley de Casas de Cantabria de 2018, que introdujo en el ordenamiento jurídico el concepto de 'retornado' y la necesidad de su protección.
De ahí el afán del Ejecutivo de Miguel Ángel Revilla de reforzar vínculos con los cántabros que viven a miles de kilómetros de distancia: «Esta orden tiene el fin de propiciar el reencuentro con su tierra, sus familiares, con la sociedad cántabra en general y, con ello, favorecer su derecho al retorno».
La consejería de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior señala que esta nueva línea de ayudas está condicionada por el reto demográfico y la lucha contra el despoblamiento: «Opta por promover el derecho de retorno mediante el conocimiento de aquellas partes del territorio de Cantabria merecedoras de políticas activas de revitalización», explica la orden.
¿Y si el beneficiario tiene alojamiento o casa en la región? En ese caso, deberá solicitar únicamente la partida para el desplazamiento y la manutención. Es decir, esa comida familiar o con amigos corre a cuenta del Gobierno, pero deberá realizarse en cualquiera de los 39 municipios con problemas de población.
Las bases de la orden establecen otros supuestos, como el lugar de procedencia. Si los cántabros que deciden venir a visitar la comunidad viven en España, recibirán un total de 600 euros para transporte (cualquiera de ellos salvo el vehículo propio, cuyos gastos no se consideran subvencionables), alojamiento y manutención, pero si viven en el extranjero obtendrán 1.000 euros. Los cálculos del Gobierno rondan los 80 euros para el alojamiento al día y 34 de manutención en establecimientos turísticos situados en cualquiera de los municipios en riesgo de despoblamiento.
No podrán beneficiarse de la ayuda aquellas personas que no estén al corriente en el cumplimiento de las obligaciones tributarias y de la seguridad social.
El plazo de presentación de solicitudes en el Registro de Casas de Cantabria (calle Castelar, 5, de Santander), será de un mes desde el día siguiente de la publicación de la convocatoria.
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