El Gobierno exige a Iberia «soluciones urgentes» para la ruta aérea a Madrid

La huelga de pilotos de Air Nostrum –la compañía que opera los vuelos por encargo de Iberia– ha hecho añicos las comunicaciones aéreas entre Cantabria y Madrid en el momento más inoportuno. El tema no es nuevo. La Asociación Amigos de Parayas recuerda que prácticamente todos los lunes desde febrero (y algún viernes) se están incumpliendo las frecuencias comprometidas. Pero ahora llega el verano y los paros se han recrudecido.

¿Las consecuencias? Tres problemas en junio y julio. La venta de billetes es una locura desde hace semanas. Unos días hay a la venta tres salidas, otros una... Y en varias jornadas, ninguna. A esto hay que sumar –segunda consecuencia– que los precios están disparados. De los 31 días de julio, en 21 no había este lunes por la tarde un vuelo de ida con tarifa reducida que bajase de 200 euros. Una barbaridad. Y, por último (tercera consecuencia), ya hay –y habrá– cancelaciones.

Ante este panorama, el Gobierno de Cantabria en funciones «ha solicitado una reunión con los responsables de Iberia». Ya manifestaron su rechazo «al incumplimiento de los contratos establecidos». Por –dicen– «utilizar aviones más pequeños y ofrecer menor oferta». Problemas que se han agravado con la huelga. «El pasado 8 de mayo el Gobierno envió una carta expresando su malestar por las continuas cancelaciones, exigiendo una reunión para dar solución a estos problemas. Esta reunión se celebró el 12 de mayo, donde se confirmó por parte del Gobierno que se aplicarían las penalizaciones previstas en los pliegos del concurso. Por su parte, la compañía se comprometió a estudiar las correcciones posibles. La reiteración de las cancelaciones provocó una segunda carta el 23 de mayo donde se manifestó la necesidad urgente de buscar soluciones a los incumplimientos del contrato, reunión que se deberá celebrar esta misma semana», aseguran.

Iberia, por su parte, destaca que han hecho «un verdadero esfuerzo para mejorar la conectividad en Cantabria» respecto a 2022 y 2019, que los vuelos cancelados son los «estrictamente afectados por la huelga» y que, los que están llenos, «ya evidentemente no se muestran en la web». Insisten además en su esfuerzo por «proteger» a los clientes, en una situación que es ajena a su plantilla.