'La Goleta', 25 años conectando la enseñanza concertada
Desde su estreno en 2000, la publicación ha sido altavoz de alumnos, familias y profesores de la red de centros concertados de toda Cantabria
'La Goleta Familiar' está de aniversario. El último número en papel de la revista que lleva 25 años conectando la enseñanza concertada en Cantabria muestra en su portada un nido en manos de un niño. Es una fotografía en blanco y negro de la artista Belén de Benito que representa «la importancia de los cuidados», que apela a la naturaleza, a la ingenuidad y también a lo inesperado. Es una imagen «que cuenta una historia familiar, son mis hijos, es Vega de Pas», contextualiza De Benito, encantada de que la imagen, tomada con la diligencia y la ligereza de quien siempre lleva la cámara colgada al cuello, ilustre la portada de un número tan redondo de La Goleta.
Las cajas con la publicación ya han llegado a los 24 centros concertados cántabros donde se distribuye de forma gratuita. Las noticias escolares ocupan las secciones delanteras, si bien La Goleta Familiar se cuida muy mucho de aportar contenidos sobre literatura –tiene un pequeño suplemento encartado, La Jirafa, con entrevistas y novedades editoriales y cinematográficas–, sobre arte, gastronomía o medio ambiente.
La última portada

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Autora de la imagen Belén de Benito
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Número Curso 2024/2025
Arantxa Vidal e Iñaki Marquínez hojean el último número, recién salido de imprenta. Junto con Pino Marquínez, son los artífices de una publicación «que nació con la idea de ser un vehículo de comunicación entre los centros escolares; entre las familias, los alumnos y los profesores. En origen, fue una iniciativa que nos solicitaron desde Concapa-Cantabria –la Confederación que aglutina a las familias de los colegios concertados de la comunidad autónoma–. Querían que diseñáramos una revista que sirviera para conectar a todos los centros, que fuera una ventana para todos ellos», explica Vidal.
¿Y por qué el nombre de La Goleta? «Una goleta, un barco... Evoca la idea de llegar a puerto cada curso, todos los años. Es un nombre lleno de significados, cada número es un viaje, y se mantiene cierta incertidumbre sobre el siguiente», considera Vidal.
Veinticinco años después años, este objetivo se mantiene. En la última 'goleta', los Sagrados Corazones de Torrelavega cuentan, por ejemplo, cómo las alumnas de su equipo alevín de voleibol se han proclamado campeonas de la Liga de Plata; y, páginas después, los escolares de 3º de Infantil de La Salle, en Los Corrales de Buelna, detallan cómo prepararon la celebración de Halloween este curso. Hay noticias sobre competiciones académicas, viajes, intercambios escolares, procesiones de Semana Santa, tutorías, formación con el obispo, excursiones al campo, o jornadas solidarias. Un poco de todo. «Y tenemos una sección fija de artículos de opinión que nos escriben los alumnos, otra de viajes.... Buena parte del éxito es la alta participación que tenemos», subraya Vidal.





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Al margen de los contenidos, ella y Marquínez tratan de cuidar y esmerarse con el diseño, las portadas. La autoría de estas últimas ha recaído a lo largo de los años en creadores como Jorge Represa, Javier Rodríguez, Javier Lamela o Belén de Benito. También el chef Jesús Sánchez ha firmado una de las cubiertas.
En color o en blanco y negro, las portadas muestran diferentes miradas sobre la infancia, como ese nido sostenido que firma De Benito, autora de más portadas que evocan momentos clave en la niñez. También dan cuenta de las actividades que han organizado Vidal y Marquínez al abrigo de La Goleta, como una excursión al Parque de la Naturaleza de Cabárceno o un taller de cocina. «Nos gusta cuidar el diseño y la calidad de la fotografía», inciden los responsables de La Goleta Familiar.
Los números
En un principio, se publicaban dos números al año. Ahora se lanza uno a final de curso. En torno al mes de febrero, los editores abren el plazo para recibir los artículos, y los centros van enviando pequeñas reseñas de actualidad. Los editores, por su parte, también piensan en nuevas secciones, como la dedicada a la mitología con Rocío del Carmen que ocupa una de las páginas del último número.
La Goleta se publica en papel. En este formato quieren persistir sus responsables, resistiendo un poco a la inmediatez. «Vamos a por otros 25 años más. Seguimos creyendo en la idea de conectar los centros, en dar protagonismo a los alumnos. Nos hace mucha ilusión leer sus artículos. Y no queremos olvidarnos de agradecerle a Mónica Haro y a Ana Medina su confianza».
Haro es la presidenta de Concapa y Medina, su secretaria. «La Goleta es una de las maneras que tienen los colegios de compartir sus actividades, así nos sentimos todo un poco familia, eso es lo que pretendemos ser», apunta la primera, no sin agradecerle a los anunciantes «que nos apoyen». Concapa apuesta por mantener una publicación cuyo «éxito» se llega «cuando los niños que la protagonizan se convierten en padres de los niños que empiezan a leer la revista».
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