La gripe ya está en Cantabria

«No hay duda, los datos nos indican que la onda gripal está empezando. Hay un parámetro que nunca falla, y es que los médicos de Atención Primaria nos comuniquen varios días seguidos más de 25 diagnósticos sospechosos de gripe. Estamos en esa fase y, aunque el nivel de transmisión aún es muy bajo, es la primera señal de que la gripe ha llegado a Cantabria», explica Manuel Galán, jefe de servicio de Salud Pública. Ahora bien, no se puede predecir cómo será su comportamiento, si habrá una subida rápida de contagios o la curva crecerá a un ritmo más sosegado. «Eso no lo sabemos». Lo que sí se sabe es que el virus que ha empezado a circular es la gripe A. Por lo que «lo esperable es que las vacunas sean efectivas», añade. «Aún hay tiempo para los que no han acudido a ponérsela, pero no se debe esperar mucho más porque tarda quince días en ofrecer la protección desde que se recibe el pinchazo» y para entonces las posibilidades de coger la gripe se habrán multiplicado.

Hasta la fecha, se han protegido del virus gripal 109.000 personas, una cifra similar a la de la campaña de 2022, aunque no ha tenido el seguimiento deseado entre los menores de 5 años, el grupo diana que se incorporó como principal novedad. «Solo uno de cada cinco niños de 6 a 59 meses ha recibido la vacuna antigripal -incluidos ahí los considerados de riesgo-. Ahí estamos lejos de la tasa objetivo que era alcanzar el 50%», admite el jefe de servicio de Salud Pública, que insiste en que «cuantos más niños vacunados, menos sustos después. Hay que animar a las familias a que protejan a sus hijos, que no duden, porque en ocasiones la gripe puede complicarse también en menores que no tienen ningún factor de riesgo. Y recordar los beneficios que aporta la vacuna, que genera una respuesta inmunológica más amplia -ya que la dosis abarca varios subtipos diferentes del virus- que si se pasa la infección, con la que solo se inmunizará frente a ese tipo concreto», explica.

En vista de que la onda gripal se ha adelantado por segundo año consecutivo -la temporada pasada se produjeron dos curvas, «algo que tampoco es lo habitual»-, «igual hay que plantearse adelantar la campaña de vacunación a septiembre, para tener más margen», reflexiona Galán.

Pero, puesto que ya ha aterrizado en Cantabria, recuerda que «las precauciones deben ser las mismas para todos los virus respiratorios: lavado de manos y utilizar la mascarilla en caso de sintomatología para evitar la transmisión», sin perder de vista que también están aumentando los casos de covid -hay veinte hospitalizados, dos en la UCI- y de VRS, el causante de la oleada de bronquiolitis en los más pequeños, que empezó a crecer la semana pasada, aunque sin impacto «por el momento» en los bebés protegidos con la nueva inmunización -ahí la cobertura llega al 95%-.