Las huelgas de Ryanair y Vueling no afectarán al Seve Ballesteros

La huelga anunciada por los pilotos y tripulantes de cabina (TCP) de Ryanair tras el cierre anunciado por la compañía irlandesa de las bases españolas (Las Palmas, Tenerife, Lanzarote y Gerona) no afectará a las llegadas y salidas del aeropuerto de Santander-Seve Ballesteros en los próximos días. Así lo confirmó la aerolínea ayer a este periódico, preguntada por los efectos del parón anunciado esta semana y que tendrá lugar, haciendo suma entre ambos colectivos, los días 1, 2, 6, 8, 13, 15, 19, 20, 22, 27 y 29 de septiembre. La huelga «afectará a catorce entre más de 1.900 vuelos, y a ninguno que tenga que ver con Santander», aseguraron desde Ryanair. Y lo bueno es que la protesta del personal de tierra de Iberia, que viene condicionando el movimiento de pasajeros en el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, tampoco pasará factura en el Seve, según pudo saber este periódico a través de la Asociación Amigos de Parayas. Entre las cancelaciones que Vueling ha anunciado, ninguna tendrá que ver con Santander.

La huelga de los trabajadores de estas compañías responden a diferentes problemas. Los empleados de Ryanair, por ejemplo, deben el desencuentro laboral al cierre de sus bases en Canarias -para la empresa «deficitarias»-, lo que ha llevado a sus pilotos a registrar un preaviso de huelga de cinco jornadas -días 19, 20, 22, 27 y 29 de septiembre-, el pasado martes. La parte positiva para el usuarios del Seve Ballesteros es que la huelga afectará, como aseguró la aerolínea, a los aeropuertos que trabajan como base, una función que no corresponde al aeropuerto local.

El motivo de la huelga se debe a este cierre «injustificado», como calificó el miembro de la sección sindical de Sepla en Ryanair -sindicato convocante-, Francisco Gómez, que además conllevará el despido de unos 150 pilotos «sin ningún motivo». De ahí que el responsable pasó a afear el comportamiento de la compañía irlandesa: «Están montando un conglomerado de empresas de 'low cost' dentro del 'low cost'».

Más protestas. El enfado de los pilotos llevó al Gobierno de España, vía Ministerio de Fomento, a suplir su vacío con servicios mínimos «abusivos», según han denunciado los TCP -son del 100% para los vuelos no peninsulares, del 60% en los peninsulares e internacionales con desplazamiento igual o superior a cinco horas y al 35% de los vuelos peninsulares con tiempo de desplazamiento inferior a cinco horas-.

Por último, las protestas en El Prat tampoco obligarán a los usuarios a retrasar ni adelantar sus planes. Según informa la Asociación Amigos de Parayas, el conflicto de los trabajadores de Iberia y la cancelación de decenas de operaciones por parte de Vueling no llegarán al Seve.