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Llega el momento de irse de vacaciones y para los amantes de los perros se plantea una de las preguntas más frecuentes: ¿Con quién dejo a mi mascota? Una cuestión que para muchos dueños supone un quebradero de cabeza a la hora de decantarse por alguna de las diferentes posibilidades que existen en este mercado. Una de las opciones que más enteros gana en los últimos años son los hoteles caninos, centros especializados en acoger a los canes desde unos pocos días hasta varias semanas. Desde las razas más pequeñas hasta las más grandes, todos tienen cabida en estos espacios dedicados al cuidado de los perros mientras sus amos se encuentran fuera de casa.
Kin es la mascota de Borja Viadero y ya tiene experiencia en alguna de estas guarderías que se localizan en diferentes puntos de Cantabria. «Las veces que he tenido que irme más de una semana por vacaciones, lo he llevado a uno de estos centros. Mi perro es un pastor belga y tampoco podía dejarlo en casa de mis padres, porque es muy activo y al final tienes que estar muy pendiente de él y no vale con un paseo de cinco minutos. Lo tengo acostumbrado a salir conmigo cuando monto en bicicleta». En el caso de Borja al tener un can de raza grande necesita que su mascota se encuentre en un área espaciosa mientras se ausenta. «No me volví loco a la hora de buscar, me fijé en que el lugar contase con una parcela amplia y confiar en que te aseguran que va a pasar bastante tiempo suelto para poder moverse con cierta libertad». Una de las cosas que más agradecen los dueños es el trato con los responsables y saber a través de WhatsApp el estado de sus perros con fotos y vídeos. «Estoy contento con el trato y la comunicación que recibes, además tenían gallinas y el último día me dieron media docena de huevos cuando cogí al perro. Tuvieron un detalle conmigo en ese sentido también».
Aunque siempre hay primeras veces, es el caso de Noemí Borrallo que va a llevar a su mascota Teddy, un border collie, porque se marcha a un evento familiar en Francia. «Estoy bastante tranquila porque sé que va a estar bien, me han hecho traerlo una semana antes de dejarlo para ver cómo se adapta con el resto de perros y he podido ver los espacios donde va a estar». Unas instalaciones en las que solamente se encuentran en casetas durante la noche y luego hacen excursiones y actividades durante todo el día: «A las siete de la mañana se les abre la jaula y están al aire libre para ir a la playa o al monte con el resto de perros». Una de las principales razones para decantarse por ese centro es el boca a boca. «Mi primo suele llevar allí a su perro, además de cuidar se dedican también al adiestramiento. Ya nos han dicho que sí necesitamos en cualquier momento fotos o vídeos que nos avisen y nos la mandan».
Pero no todas las experiencias son siempre positivas. «He llevado mi perro Teo a dos centros distintos; en el primero, estuvo unos días y volvió con una pequeña herida en el morro y en el segundo, estuvo un mes y fue un trato súper especial en un sitio mucho más espacioso». Sandy Franco subraya la importancia de encontrar un sitio donde su can esté cómodo y ella pueda estar tranquila al dejarlo en vacaciones. «Dar con la clave es complicado, pero al final encontrar un sitio más casero te da esa calma para no estar preocupada los días que estás fuera». Otra cuestión muy relevante es el espacio del recinto y la relación con los otros perros:«Es importante que vean y cuiden la interacción con el resto de canes, no todos están preparados para socializar, ya sea porque son más grandes o porque no obedecen igual ante las órdenes que le den los chicos que están en estos centros».
Ante la gran demanda de cuidadores de perros durante la época estival, las aplicaciones se abren paso como alternativa a los hoteles caninos. La posibilidad de dejar a tu mascota al cuidado de otra persona que la acoja en su hogar o que visite con frecuencia la tuya para encargarse de tareas como ponerle las comidas y sacarlo a pasear. Una solución que emplea a menudo Daniela Restrepo con sus perros Ruffo y Bombón, dos bulldogs franceses.
«Nunca me han gustado como tal las guarderías caninas, prefiero contactar con gente a través de las aplicaciones para que cuiden de mis perros cuando me tengo que marchar por trabajo o de vacaciones». Una red social en la que puedes hablar y conocer la disponibilidad de precios y servicios de cada usuario. «He dejado a mis perros en casa de estas personas y otras veces han venido ellos a la mía, no me importa ninguna de las dos opciones. Lo bueno es que si vienen a la mía pues controlo un poco más los horarios de entrada y salida de los paseos».
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