Godzilla, la estrella más brillante y más lejana, descubierta desde Cantabria

La conclusión, después de millones de mediciones es que aquello que detectaron hace seis años es una estrella, a la que han bautizado con el nombre de Godzilla, el gran dinosaurio del imaginario japonés, debido precisamente a la enormidad de su tamaño y brillo. El investigador cántabro explica que será posible seguir viendo a Godzilla otros 50 años. Pero el común de los mortales no debe hacerse ilusiones: no será posible mirar al firmamento en una noche estrellada ver una lucecita lejana y pensar que justo aquel es el astro monstruoso. Godzilla solo es visible utilizando un telescopio espacial y ha sido posible verla gracias a que tiene cerca una galaxia enana que ha sido utilizada por el IFCA para alcanzarla.

Diego viene avalado por otros trabajos: «La anterior estrella con récord también era nuestra» rememora antes de simplificar al máximo cómo se determinó qué era exactamente el gran resplandor descubierto. «Es un juego de descartes. Sabemos que ahí existe 'algo' que tiene unos componentes determinados y nuestra labor ha consistido en ir rechazando teorías. Primero pensamos que podía ser una supernova, pero una supernova solo se ve durante un año. Luego valoramos que fuera un pequeño grupo de estrellas y aquí el tamaño no avalaba la tesis. A continuación nos preguntamos si podía ser un agujero negro, que no es visible, pero todo el material que desaparece por él emite mucha cantidad de luz antes. En este caso, el espectro no cuadra y no se vieron materiales concretos...»

Finalmente, la definición de estrella «encajó con todas las observaciones. Hemos logrado explicarlo gracias a un modelo de lente gravitatoria, que era nuestro objetivo principal. Primero tuvimos que explicar una galaxia enana (que no se ve) que está cerca de Godzilla y que nos ha servido para verla y, a partir de aquí, resolvimos».

Godzilla se ha observado con varios telescopios, incluido el Hubble (HST). «Su luz ha tardado 10.900 millones de años en llegar a nosotros y el universo tenía el 20% de su edad cuando la luz que vemos hoy salió de su superficie. Dado que las estrellas masivas son como estrellas de rock (viven rápido y mueren jóvenes), Godzilla murió hace mucho tiempo, pero aún vemos su luz», resultado de una erupción que aumentó su luminosidad «durante años o décadas», relata el científico.

Diego cree que el astro monstruoso es solo el primero de muchos ejemplos de 'monster stars' con erupciones temporales que se descubrirán mediante una técnica similar. Pero Godzilla es una estrella «rara» debido a su actividad actual. Aprovechando la posibilidad que ofrecen los telescopios naturales, «pronto descubriremos más estrellas como esta y comenzaremos a estudiarlas en sus diferentes fases para comprender cómo evolucionan y finalmente mueren», señala.

Hace ya meses que todos los implicados en el descubrimiento tenían la certeza de su importancia, pero ha habido que esperar a que lo validase la revista científica a la cual se enviaron los datos para su contraste, Astronomy and Astrophysics, referencia en el sector. Diego asegura que tiene mucha experiencia en publicaciones de este tipo y que «en pocas ocasiones había tenido tan claro que tendríamos el visto bueno: hemos trabajado mucho». Además, del cántabro, componen el equipo del descubrimiento Massimo Pascale, B.J.Kavanagh, P. Kelly, Liang Dai, Brenda Frye y Tom Broadhurst.