Una investigación iniciada en el Puerto de Santander descubre un desguace que introducía vehículos sin autorización

La investigación fue iniciada en el Puerto de Santander, ante la llegada sospechosa de camiones cargados con vehículos procedentes de Reino Unido y con destino a la localidad gallega. Después, la Guardia Civil comprobó que también se daban estos desembarcos en otros puertos de España y en el Euro-Túnel de Calais (Francia). Las actuaciones determinaron que desde el inicio del 'Brexit' llegaron a España con destino a ese desguace un total de 424 vehículos, lo que supone más de 600.000 kilos de chatarra. En cinco años el desguace recibió más de 5.000 vehículos, tanto de procedencia extranjera como nacional.

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En cinco años el desguace recibió más de 5.000 vehículos tanto de procedencia extranjera como nacional

En cuanto a la gestión de los componentes, ésta era irregular dado que realizaban una mínima recuperación de los fluidos de los aires acondicionados, que son residuos peligrosos que deben ser obligatoriamente recuperados y entregados a un gestor autorizado. Por esa razón tuvo que intervenir el Seprona, que comprobó que el desguace tenía vehículos con el certificado de destrucción y descontaminación pero que no habían sido descontaminados completamente. Así, estaban almacenados con residuos como aceites, líquidos de frenos, fluidos de aire acondicionado, etcétera. Todos ellos son elementos que al contacto con el aire se volatilizan y tienen la capacidad de permanecer en la atmósfera durante catorce años. Esto, unido a sus características propias, hace que este tipo de gases formen parte de los que generan la problemática del calentamiento global. Además, se consideran un perjuicio para el equilibrio de los sistemas naturales y para la salud de las personas.

Parte de los componentes de los vehículos gestionados por el desguace eran vendidos 'online'. La Guardia Civil localizó además en una nave agrícola más de 4.000 neumáticos usados, cuyo origen se supone que era del desguace investigado. El propietario de dicha nave no contaba con la autorización para el almacenamiento y venta de los neumáticos lo que, unido a que la propiedad se encuentra en un entorno forestal, se considera un riesgo por el gran volumen de neumáticos almacenados.

La operación, desarrollada la semana pasada en las provincias de Pontevedra y León, se saldó con siete detenidos y cinco investigados a los que se les imputan delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente, falsedad de los certificados de destrucción y descontaminación de vehículos, blanqueo de capitales, contra la hacienda pública y pertenencia a grupo criminal. Los vehículos destinados a desguace procedentes del Reino Unido, deben contar con las comunicaciones y autorizaciones pertinentes de las autoridades medioambientales de España, para poder llevar a cabo los traslados transfronterizos de residuos, careciendo en este caso de tales autorizaciones.

La investigación ha sido dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Villagarcía de Arousa, e impulsada por la Fiscalía de Medio Ambiente de Pontevedra. ha contado con el apoyo de efectivos de la Guardia Civil de la Comandancia de Pontevedra y León.