«El Puerto debe convertirse en un operador ferroviario con terminales en La Pasiega y Mataporquera»

Durante el acto, presentado y moderado por la periodista Pilar González, el presidente de la Autoridad Portuaria también ha cargado con dureza contra «la lentitud» del Gobierno cántabro en conceder licencias ambientales, lo que ha provocado, por ejemplo, la paralización del proyecto de Coated Solutions en terrenos del Puerto. «Vamos a una velocidad distinta que el resto de comunidades. Cuando visitamos con empresarios los espacios de ampliación del Puerto, en La Pasiega, por ejemplo, y les decimos que harán falta 3 o 4 años para poder comprar los terrenos, nos dicen que no le hagamos perder el tiempo, se suben al coche y se van», ha reconocido.

González lamentó las limitaciones ambientales que se encuentran las empresas al instalarse en Cantabria. «Vendrá mucha gente por nuestros paisajes maravillosos y nos iremos muchos a trabajar a otro sitio», ha avisado.

A pesar de esto, la máxima autoridad del Puerto es optimista con el futuro de la ampliación de Coated Solutions. «Creo que no se van a ir de Santander, puede que hagan algo distinto a lo previsto, pero se quedarán aquí. Y en el caso de que no lo hicieran hay opciones de más empresas para ocupar esa parcela».

El responsable del Puerto ha desvelado que tanto el tráfico de mercancías como el número de pasajeros en Santander ha crecido durante el año pasado. En su intervención en el Foro Económico de El Diario Montañés, Jaime González no sólo ha destacado la subida de un 22% en el movimiento de vehículos y otros enseres, sino también la consolidación de la capital cántabra como la que más cruceristas recibe de la fachada norte del país: 241.000 al año, por encima de La Coruña, Bilbao, Vigo y Gijón, por ese orden. «Y estamos en una etapa de crecimiento a pesar del Brexit y de los nubarrones que tenemos delante», ha señalado González.

Uno de los retos a los que se ha enfrentado el Puerto en los últimos meses ha sido el aumento de polizones. Más de 900 intentos hubo durante el último año. Un problema que ha obligado a colocar una valla de cuatro metros de altura a lo largo del frente marítimo, desatando la polémica entre quienes defienden la integración entre el Puerto y la ciudad. González, que ha mostrado la pantalla de su teléfono móvil del pasado domingo, con más de una decena de avisos por intentos ilegales de entrada al Puerto. «Tenemos que proteger nuestra zona de servicio, pido comprensión y apoyo», ha solicitado el presidente, tanto para evitar accidentes como por la seguridad de las empresas inversoras, que pierden su mercancia en los puertos de destino si hay polizones.