Finalmente, la vocación ha pesado más que las ofertas que ha recibido para seguir formando parte de la estructura del Gobierno otra legislatura. Y eso que tuvo en la mano la posibilidad de convertirse en el máximo responsable de la sanidad cántabra. Pero ni siquiera la insistencia del vicepresidente y líder socialista Pablo Zuloaga, que apostó por él como primera opción para dirigir la Consejería, le hizo dudar. Aceptar el cargo suponía aparcar de nuevo su desarrollo profesional en la faceta clínica y, a estas alturas, Pascual prefería moverse entre pacientes más que entre políticos.
Cuando tomó posesión como director gerente, en septiembre de 2015, reconoció que hasta aquel momento nunca se había planteado que esa responsabilidad acabara formando parte de su currículo. Pero «a Valdecilla no se le puede decir no», señaló de aquella sin ocultar su orgullo. La oferta de María Luisa Real implicaba la vuelta a Cantabria, la tierra de su familia política, después de su paso por el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), y el regreso al hospital en el que inició su carrera médica. Llegó dispuesto a defender «la camiseta de Valdecilla» y «a reforzar la marca de la casa», a sabiendas de que tenía por delante un reto que no era baladí: la apertura del nuevo complejo hospitalario, después de quince años de obras y dilaciones, con el consiguiente macrotraslado a las Tres Torres, que llevaba ligado también el cierre de la Residencia Cantabria. Pero además de la mudanza y la puesta en funcionamiento del nuevo Valdecilla (incluida la Unidad de Reproducción Asistida, la farmacia hospitalaria, los nuevos laboratorios...), al equipo de Pascual le ha tocado ejercer de mediador en las discrepancias permanentes entre Sanidad y la adjudicataria del contrato de colaboración público-privada, Smart Hospital (Ferrovial-SIEC), especialmente tras la dimisión de la cúpula de la Gerencia del Servicio Cántabro de Salud (SCS), a raíz de la denuncia de presuntas irregularidades en varios contratos.
Pascual ya ha dado cuenta de los avances y los proyectos en curso a Miguel Rodríguez cuando le ha comunicado su marcha, haciendo especial hincapié en «una oportunidad que no se puede dejar escapar» y que defendió con ahínco ante las dudas que en su día mostró María Luisa Real: la instalación en Valdecilla del primer centro de terapia de protones de España dentro del sistema público de salud. Una oferta, que se considera crucial para hospital, que pasaría a ser centro de referencia nacional para este eficaz tratamiento contra el cáncer, y que fue planteada hace casi un año por una empresa privada, dispuesta a invertir 40 millones de euros. Con el visto bueno del nuevo Gobierno, ahora falta empezar a dar los pasos para hacerlo realidad.
Beatriz López
Médico experta en gestión de procesos y servicios de información, en octubre de 2015 fue nombrada subgerente de Valdecilla, cargo que ocupa hasta la fecha. Llegó a Cantabria procedente del Servicio de Salud del Principado de Asturias. Ha rechazado la oferta del Gobierno cántabro de ser consejera de Sanidad.
Rafael Tejido
Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Cantabria y especialista en medicina interna, es el coordinador de la Unidad de Alta Resolución Hospitalaria (UARH) de Valdecilla. Tejido fue director médico del hospital entre 2007 y 2011, siendo gerente del hospital José Luis Bilbao y consejero Luis Truan.
Las alternativas
Será la próxima semana cuando el consejero de Sanidad, que aún tiene pendiente el nombramiento de la Directora de Salud Pública para completar el primer nivel de su organigrama, anuncie quién tomará las riendas del hospital en sustitución de Pascual. Según ha podido saber este periódico, se barajan al menos dos nombres: el de la actual subgerente de Valdecilla, la asturiana Beatriz López, y el de Rafael Tejido, médico de 'la casa' al frente de la Unidad de Alta Resolución Hospitalaria (UARH).
López, que tampoco ha querido dar el salto a la política cuando le ofrecieron convertirse en la titular de Sanidad tras la negativa de Pascual, ha sido la mano derecha del gerente y una de las personas que defendió el nombre de Miguel Rodríguez (con quien también trabajó en Asturias) para tomar las riendas de la Consejería. Experta en gestión de procesos y servicios de información, tuvo la posibilidad también de ser la gerente del SCS -cargo que finalmente ocupó Celia Gómez-, pero declinó el ofrecimiento. Hay quien apunta que es una de las candidatas a la Subdirección de Asistencia Sanitaria del SCS, vacante tras la marcha de Ana Tejerina.
Si el consejero opta por dar continuidad al proyecto puesto en marcha por el equipo de Pascual, la elección de Beatriz López será clara, aunque hay otro escenario posible que es el de la renovación. En ese caso, parece que tiene todas las papeletas Rafael Tejido, que ya fue director médico de Valdecilla siendo gerente José Luis Bilbao y consejero de Sanidad Luis Truan en la legislatura del PRC-PSOE de 2007-2011. Tejido fue relevado por el anestesista José Manuel Rabanal cuando el PP volvió al Gobierno y nombró a César Pascual como gerente de Valdecilla. Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Cantabria y especialista en medicina interna, Tejido ha desempeñado desde 2002 el cargo de coordinador de la Unidad de Alta Resolución Hospitalaria, puesto al que retornó tras su etapa en la Dirección.
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