Lombó valora la baja incidencia del Covid en las aulas y apela a «no bajar la guardia»

Lombó ha hecho estas declaraciones al término de la Conferencia Sectorial de Educación, presidida por la ministra Isabel Celaá, quien ha realizado un repaso a las medidas adoptadas en el ámbito educativo para luchar contra la pandemia durante este primer trimestre.

Precisamente este lunes Cantabria ha sumado este lunes seis aulas con alumnos en cuarentena preventiva en Infantil y Primaria, otras dos completas en la etapa de ESO, Bachillerato y Formación Profesional, y además en esos niveles hay otras cinco clases en las que hay alumnos en cuarentena.. Además, se ha establecido la cuarentena preventiva para todo el aula en el colegio Valle de Reocín de Reocín, y también en el Menéndez Pelayo, el Manuel Cacicedo, el Haypo y Las Esclavas de Santander, en este último caso en dos clases.

De esta forma, hay siete aulas de Infantil y Primaria en cuarentena preventiva en la región, lo que representa un 0,26 % de todas las que existen.

En las etapas superiores hay siete aulas nuevas con estudiantes en cuarentena preventiva. En los centros Torres Quevedo y Las Llamas de Santander, y en el Marqués de Manzanedo de Santoña y el Montesclaros de Reinosa ,son alumnos aislados los que están en esta situación.

En el centro Santa María Micaela y en el Castroverde son las aulas enteras las que están en cuarentena. Además, hay otra aula con alumnos en cuarenta preventiva en el CEPA de Camargo

Lombó ha explicado que Cantabria ha apostado en todo momento por una presencialidad total, también para el alumnado de Secundaria. Una medida, ha dicho, que hoy se demuestra «acertada», porque ha permitido al alumnado continuar con su proceso de aprendizaje y no ha supuesto una incidencia mayor del virus.

Según ha explicado, la mayor parte de este primer trimestre, el porcentaje de aulas de Infantil y Primaria se ha mantenido en un nivel inferior al uno por ciento, una situación «mucho mejor de la que todos esperábamos antes del inicio de curso».

En su opinión, es el resultado de un «esfuerzo y un trabajo conjunto» de todos los agentes de la comunidad educativa, por lo que ha apelado a la «responsabilidad individual y colectiva» para no «bajar la guardia» durante el periodo no lectivo de Navidad y evitar «dar un paso atrás».

Durante el encuentro se ha anunciado la creación de unos grupos de trabajo para abordar las adaptaciones curriculares derivadas de la nueva Ley de Educación. Sobre este extremo, ha dicho Lombó, Cantabria ha comenzado ya a organizar sus grupos internos, para analizar las modificaciones que supondrá la nueva normativa y comenzar a trabajar sobre ellas.

La Sectorial también ha analizado el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, que se financiará con fondos europeos, y en el que la Educación constituye uno de los elementos tractores, junto al conocimiento, la formación continua y el desarrollo de capacidades.

Sobre este extremo, Lombó ha afirmado que su departamento ha realizado una propuesta «seria y realista» en materia de Educación, con la inclusión de seis proyectos en el Plan 'Cantabria Reactiva', que permitirían, ha dicho, una «mejora tangible» en el sistema educativo y la formación del alumnado.

Los proyectos por los que apuesta Cantabria tienen tres objetivos básicos: la digitalización del sistema educativo, el refuerzo de la escuela rural y la mejora de la calidad de la educación, con una ampliación de las oferta educativa y nuevas infraestructuras.

Así, por ejemplo, el Ejecutivo de Cantabria ha presentado un proyecto para la ampliación y mejora de la red de Centros Integrados de Formación Profesional de Cantabria que prevé mejorar las instalaciones y la oferta educativa de los dos actuales, y crear dos nuevos: un Centro Integrado Marítimo Pesquero y otro que aglutine la oferta sobre Energía y Agua.

Además, se ha diseñado un proyecto de inmersión lingüística de dos semanas de duración en la que participarían alumnos de entre primero y cuarto de la ESO. La iniciativa, que tendría un coste de un millón de euros anuales y se desarrollaría en el Centro Rural de Innovación Educativa (CRIE) de Viérnoles, acogería a 120 alumnos por edición, con el objetivo de que pasaran al año algo más de 1.500 estudiantes por estas instalaciones en las que durante ese tiempo convivirían en un ambiente de total inmersión lingüística.

Por otra parte, se han incluidos dos proyectos de base tecnológica -uno para la digitalización de la escuela rural y otra para la digitalización del sistema educativo- y otro para ampliar el actual servicio de transporte escolar a todo el alumnado de etapas postobligatorias.

El Conservatorio de Música y Danza de Torrelavega completa las propuestas incluidas por Educación en el Plan Cantabria Reactiva.