La mascarilla será obligatoria en Cantabria solo hasta el martes

La obligación de uso de las mascarillas en centros de salud y hospitales, por tanto, no está sujeta a un plazo concreto sino a la evolución en cada territorio de la tasa de infectados. De hecho, autoriza a las autonomías en las que la curva de contagios por los virus respiratorios (gripe, covid y el sincitial) descienda durante dos semanas consecutivas a pasar de la obligación de uso de la mascarilla en todos los centros sanitarios a solo una recomendación, si así lo desean. Y justo en ese contexto se mueve en la actualidad Cantabria, que dio por superado el pico de gripe en la última semana de diciembre tras constatar en el arranque de enero un descenso del 7,6% en los contagios, al tiempo que están decayendo «desde hace cuatro semanas los casos de VRS» y se aprecia «un retroceso importante de covid», como explicó el martes Luis Viloria, jefe de Vigilancia Epidemiológica.

Es por eso que el consejero de Salud, César Pascual, tras recibir la notificación del Ministerio en la tarde de este miércoles, comunicó que Cantabria acata esta resolución «unilateral» –esta noche ya entró en vigor la obligatoriedad de las mascarillas en centros sanitarios– «al menos hasta el próximo martes», cuando se revisará los datos de incidencia acumulada y espera confirmar esa tendencia a la baja reflejada la primera semana de enero. No obstante, lamentó que se haya tomado esa decisión «sin aval técnico ni consenso con los consejeros», que ha sido la fórmula de trabajo legalmente establecida para el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Para Pascual, esta decisión «ofrece importantes dudas acerca de su legalidad, pero especialmente supone un injustificado ataque y menosprecio a las competencias que tienen las comunidades autónomas», y considera que «si la ministra hubiera apostado por diálogo, y no por la imposición, no hubiera sido difícil lograr el consenso, y se hubiera evitado llegar a una situación que supone romper con los principios de respeto y la lealtad institucional que deben presidir las relaciones entre las administraciones».

A la espera de la nueva remesa de datos de contagios, no hay autonomía alguna que pueda abandonar todavía la obligatoriedad, aunque, al igual que Cantabria, Andalucía, País Vasco, Extremadura y Cataluña, además de Ceuta, están a una sola caída de los positivos de pasar a la recomendación.

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Hasta la comunicación de esta decisión unilateral de Sanidad, solo seis autonomías, Comunidad Valenciana, Murcia, Cataluña, Aragón, Asturias y Canarias, habían dictado el uso obligado de mascarillas en todos los centros sanitarios. La mayoría ordenó la medida por un plazo de 15 días. Otras seis comunidades, Galicia, Cantabria, Navarra, La Rioja, Castilla-La Mancha y País Vasco, se limitaban a pedir el uso de las mascarillas en centros sanitarios y residencias solo como recomendación y cinco más, Madrid, Andalucía, Baleares, Extremadura y Castilla y León, solo aconsejaban el uso de cubrebocas a los ciudadanos que tengan síntomas de infección respiratoria.