Medio siglo del hospital de la Mutua Montañesa

Las obras de construcción del hospital comenzaron en 1970, y en abril de 1972 inició su actividad con el nombre de Centro de Prevención y Rehabilitación Ramón Negrete. La especialidad del hospital es la rehabilitación. Para tal fin dispone de un gimnasio de 2.000 metros cuadrados, uno de los más grandes de España. En 2021 sus profesionales realizaron 55.000 sesiones de rehabilitación, atendieron a 12.000 pacientes, asistieron 7.000 urgencias, 45.000 consultas, más de 1.300 intervenciones quirúrgicas, 5.000 resonancias magnéticas y 9.000 radiografías.

Gracias a tratamientos con células madre y cirugías plásticas de reconstrucción, muchos pacientes que habían sufrido un accidente laboral han recuperado la movilidad; muchos de ellos con traumas originados al trabajar con maquinaria y material inflamable, y al sufrir caídas y accidentes de tráfico.

La Mutua Montañesa tiene en Cantabria cuatro centros: el hospital, su sede central situada en la calle Ataúlfo Argenta y dos delegaciones, una en Castro Urdiales y otra en Torrelavega. Sorprende un dato: «Somos más grandes fuera de Cantabria que dentro», destaca el director gerente, Alberto Martínez Lebeña. «Protegemos a 200.000 trabajadores en toda España y a 85.000 en la región. Para entenderlo, somos la Seguridad Social de los trabajadores». Así, la compañía tiene veinte delegaciones en todo el país.

Actualmente, el de Santander es el hospital de referencia de atención especializada de las mutuas en Cantabria, al ser el único de carácter laboral-traumatológico-músculo-esquelético en la comunidad autónoma, dando cobertura a prácticamente la totalidad de los trabajadores laborales de Cantabria.

El centro trazó en los años 70 un proyecto moderno, incorporando «las ideas arquitectónicas y funcionales más avanzadas», con espacios libres, ajardinados, zonas deportivas y aparatos médicos dotados de la última tecnología para su fecha. A principios de los años 80 comenzaron con la cirugía artroscópica de la mano del doctor Cugat, precursor en España de esta técnica y cirujano reconocido a nivel mundial, y en los 90 realizaron operaciones de reimplante y reconstrucción de manos o parte de las mismas.

En 1993 el hospital abrió el servicio de asistencia también a los accidentados remitidos por distintas entidades con las que se estableció convenio, incluido el Consorcio de Compensación de Seguros, y diferentes compañías de seguros por accidentes de tráfico. Y en 2011 el hospital comenzó a dar servicio al resto de mutuas de la región que requieren sus servicios.

El hospital ha estado en constante renovación y actualización, lo que ha supuesto una inversión en la última década de más de ocho millones de euros destinados tanto a sus instalaciones como a su equipamiento.