La ministra de Transición Ecológica, a bordo del catamarán electrosolar

Ribera ha dicho que este barco «representa perfectamente por qué y cómo es posible conciliar la protección del medio ambiente -con »menos ruido, cero emisiones y consumo 100% de energías renovables- con una actividad que necesita empeño, innovación, talento y emprendimiento«.

Al respecto, ha destacado que «no podemos pensar ya en un desarrollo económico que al pasado, ambientalmente dañino e intensivo en consumo de recursos, sino en un futuro económico viable en el tiempo y que se alimente de este tipo de soluciones».

La ministra se ha congratulado de que su primera su primera salida de Madrid y su primera visita a Cantabria permita mostrar, con la inauguración de este barco, «hasta qué punto la transición ecológica es una realidad que hay que alimentar«.

A la vez, ha recalcado que el gran desafío en materia de cambio climático es el transporte y que las emisiones asociadas a éste requieren soluciones en tierra y en transporte marítimo.

La ministra ha inaugurado el barco en compañía del presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla, quien ha destacado que este barco es «tecnología cántabra, hecha en Camargo, para el mundo».

Les han acompañado también el delegado del Gobierno, Pablo Zuloaga -que hoy se ha estrenado en el cargo-; la vicepresidenta del Gobierno regional y consejera de Medio Ambiente, Eva Díaz Tezanos; el consejero de Industria, Francisco Martín; la alcaldesa de Camargo, Esther Bolado, y el primer teniente de alcalde, Héctor Lavín, entre otros.

El barco ha sido construido por la empresa cántabra Metaltec Naval, ubicada en el polígono de Raos en Camargo. Su nombre es ECOCAT y es el único en Europa de estas características ya construido y comercializable, según ha asegurado el director general de Metaltec Naval, Enrique Arriola, quien ha anunciado que en la segunda quincena de julio lo trasladarán al Mediterráneo.

La embarcación, con 19 metros de eslora, 8 de manga y capacidad para 120 pasajeros, posee un sistema de propulsión totalmente eléctrico, sin motores auxiliares, con una autonomía de navegación de ocho horas sin recargas.

Está dotado con dos motores de 50 kW y 8 baterías de 30,5 kW cada una, cuatro por patín del catamarán. Para responder a las necesidades de generación energética solar fotovoltaica, se han instalado 120 paneles solares, para lo que se ha creado un sistema neumático de alas solares desplegable y retráctil para aumentar la superficie de captación de energía, con lo que se obtienen 40 kw de energía limpia aportada por el sol.

Metaltec Naval ha invertido 1,8 millones de euros en el desarrollo de este primer barco totalmente electrosolar y, para ello, ha contado con la compañía alemana Torqeedo, líder internacional en la fabricación de motores eléctricos marinos, con quien ha desarrollado un innovador modelo de software de gestión del proceso de captación y almacenamiento de energía solar. El suministro de paneles solares ha sido de la marca norteamericana Sunpower y las baterías son tecnología de BMW.

Además de su marcado carácter medioambiental, el 'ECOCAT' destaca por estar adaptado en accesos, pasillos y servicios para personas de movilidad reducida. También la plataforma de popa está habilitada para el transporte de bicicletas, fomentado así el cicloturismo y la movilidad del viajero.