La mitad de los fallecidos el año pasado en accidentes de tráfico en Cantabria eran peatones

Tres de los peatones fallecieron en accidentes en autovías (como los dos jóvenes arrollados cuando cambiaban una rueda en la A-67), otros tres en vías urbanas -todas de Santander, como el atropello mortal de un camión a una mujer en Menéndez Pelayo-, y dos en travesías.

En total en la región se produjeron 230 accidentes en los que se vieron implicados peatones en 2017. En 2016 fueron 246, con cuatro fallecidos y 21 heridos graves, y en 2015 se contabilizaron 217, con un balance de siete muertos y 21 heridos graves.

En los cuatro primeros meses de 2018 se han registrado ya tres accidentes con víctimas mortales -dos en vías urbanas (como el ocurrido en marzo en Cerdigo) y la tercera en una vía interurbana (el hombre fallecido en enero cuando cruzó la S-10)- que dejaron también seis heridos hospitalizados y 16 heridos leves, según los datos difundidos por la Jefatura Provincial de Cantabria con motivo de esta campaña.

La campaña se prolongará hasta el viernes y, con el objetivo de que tenga una mayor repercusión, Tráfico ha invitado a los ayuntamientos de la región que tengan policía local a sumarse, para que informen en sus cascos urbanos a peatones y conductores de la importancia de un comportamiento adecuado en los distintos tipos de vía.

Para hacer esa labor en las vías interurbanas se cuenta igualmente con la colaboración de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.

La Jefatura Provincial ha editado un folleto que recoge las principales normas de comportamiento de peatones en vías urbanas e interurbanas y ante imprevistos en la circulación.

En las zonas urbanas, el 15% de los atropellos graves o mortales se producen en los pasos de cebra, señala Tráfico, que advierte de que las distracciones no solo afectan a los conductores y de que el uso excesivo del móvil por los peatones es algo muy frecuente y con relación directa con los atropellos.

Recomienda cruzar siempre por el paso de peatones, con decisión, pero con seguridad; si el paso está regulado por un semáforo, esperar a que se ponga en verde y los vehículos estén parados, no cruzar hablando por teléfono o escuchando música y no invadir el carril bici para caminar.

También destaca que si un agente regula el paso, sus indicaciones tienen prioridad y aconseja no atravesar plazas o glorietas, sino rodearlas.

La campaña quiere asimismo llamar la atención a los conductores sobre las limitaciones que tienen los niños como peatones, y de la importancia de educarlos para que se comporten con seguridad en las calles.

Tráfico está impartiendo charlas de educación vial, con el apoyo de las policías locales, a los niños y también a los mayores, otro colectivo vulnerable.

En el caso de las travesías y carreteras, es necesario redoblar la atención, ya que la velocidad de los vehículos es más elevada y el riesgo de morir en un atropello es mucho mayor (del 80% a una velocidad de impacto de 50 kilómetros por hora frente a un 10 por ciento con velocidades de 30 kilómetros hora).

En carretera, como norma general los peatones deben ir por la izquierda e ir provistos de chaleco entre el ocaso y la salida del sol o en condiciones meteorológicas o ambientales que disminuyan sensiblemente la visibilidad.

Tráfico destaca la especial transcendencia que tiene el comportamiento de los usuarios ante un imprevisto que obligue a detener el vehículo, como un pinchazo, una avería o un niño indispuesto.

En este casos hay que buscar un lugar seguro, fuera de la calzada, usar en todo momento el chaleco reflectante, señalizar la presencia del vehículo con los triángulos de preseñalización y evitar que el resto de los ocupantes deambulen por la vía.