Los municipios costeros habilitan parcelas para ordenar el turismo de autocaravanas

Además de aprobar ordenanzas reguladoras, los ayuntamientos con más problemas están habilitando aparcamientos públicos para atender la demanda, a la que se suma también la iniciativa privada. Sin ir más lejos hace una semana este periódico anuncio la construcción en Monte del primer aparcamiento privado para autocaravanas en Santander (de titularidad pública sólo existe el espacio junto al Parque de Las Llamas y se está tramitando la construcción de otro también municipal frente al campo de golf de Mataleñas).

No es la única iniciativa. En Miengo, otro de los municipios que más autocaravas atrae en verano, hay otro proyecto privado sobre la mesa impulsado por un promotor que está interesado en un terreno que quiere convertir en parking y «que puede materializarse en breve», según avanza la concejal de Infraestructuras, Elena Castillo.

La edil asegura que el municipio ya cuenta con un espacio habilitado para una veintena de este tipo de vehículos al lado del colegio público Marzán, pero «no lo usa nadie porque a estos turistas les gusta estar lo más cerca posible del agua». «Quieren ver la costa y el mar», explica, al tiempo que detalla que este aparcamiento está «relativamente cerca» de la costa, junto a la playa de Cuchía.

Teniendo en cuenta que la zona está afectada por el POL (Plan de Ordenación del Litoral), el Ayuntamiento tiene dificultades para encontrar otra espacio público que sea más atractivo. «Lo más viable para nosotros, a corto plazo, es el parking privado que proyecta este promotor entre las playas de Usgo y Robayera», reconoce la edil, que calcula que este nuevo espacio esté operativo para la próxima primavera.

En San Vicente de la Barquera también llevan meses buscando una zona para reubicar las autocaravanas y parece que han dado con ella. Se trata de la salida de San Vicente en dirección a Oviedo, donde hay varias curvas muertas. La alcaldesa Charo Urquiza ha conseguido que Carreteras suprima el tercer carril que sube desde el puente hasta la gasolinera, «porque no era necesario», y se van a habilitar, «después del verano», 700 metros de aparcamiento disuasorio. En esa misma zona se ubica la curva muerta donde ya se instalan autocaravanas y que habría que habilitar –facilitando el acceso de agua y luz–, además de solicitar su titularidad por ser nacional. ¿Cuándo se dará ese paso? La alcaldesa responde que cuando sea viable desde el punto de vista económico. Y advierte: «Un parking no va a ser suficiente para atender la demanda que tenemos».

En Ribamontán al Mar tampoco cuentan con las zonas necesarias para ubicar a estos vehículos, según apunta su alcalde Francisco Asón, que anuncia la próxima contrucción de un aparcamiento en Loredo o Galizano, al tiempo que recuerda que fueron el primer ayuntamiento en crear un 'autocaravaning'. ¿Cómo lo van a hacer? Pues a través del Plan de Sostenibilidad Turística de Ribamontán al Mar 'naturalmente Activo', que cuenta con 16 actuaciones y una inversión de 2,8 millones de euros procedente de fondo europeos.

«No tenemos definido el lugar exacto pero hemos mirado ya varias parcelas y tenemos claro que no ubicaría en la costa. El problema es que el Gobierno quería limitarlo a 30 plazas, pero creo que van a dejar ampliarlas porque si no tardaríamos mucho en rentabilizar la inversión», explica el veterano regidos, con la esperanza de tener en marcha ese nuevo aparcamiento para el verano que viene.

Laredo es otro de los municipios costeros que también pretende contar con nuevo área para autocaravanas el próximo verano, según avanza su alcalde, Miguel González, que recuerda que el Pleno Municipal aprobó en 2019, a propuesta de su partido, el PP (entonces en la oposición), una moción para la creación de dicho parking. La idea es habilitarlo en una zona próxima al parque de Los Tres Laredos. «Hablamos de que podrían entrar un máximo de 25, con lo que no se atendería toda la demanda», advierte el alcalde, que también reconoce que este tipo de turismo «no genera un problema para la villa».

A unos treinta kilómetros de la villa pejina, en Noja, también están valorando la creación de un aparcamiento ante el «cada vez más extenso turismo de caravanas». Según avanza la alcaldesa Mireia Maza, están valorando está posibilidad, «si bien no se ha tomado ninguna decisión al respecto».

Desde la Asociación Cántabra de Autocaravanas Lábaro, su presidente Juan José Carvajal también avanza que el Ayuntamiento de El Astillero tiene en mente la construcción de un parking para estos vehículos, aunque tiene problemas de espacio porque las zonas que podrían utilizarse están afectadas por la Confederación Hidrográfica.

Carvajal valora positivamente que los ayuntamientos pongan los medios necesarios para que este tipo de turismo se desarrolle de la mejor forma posible y esté regulado. En este sentido, aprovecha para desterrar esa especie de «estigma» que hay respecto a los autocaravanistas, «a los que nos meten en el mismo saco de los que no respetan el medio ambiente. Nosotros aportamos como cualquier otro tipo de turismo».