Los municipios han incorporado en julio a 800 parados para sus cuadrillas de mantenimiento

De los cerca de 2.000 contratos que estarán activos hasta junio de 2025, más de 800 se han firmado en la primera semana. «Quizás más», señalan desde el departamento que dirige Eduardo Arasti, ya que los consistorios tienen entre 10 y 15 días para comunicar al Servicio Cántabro de Empleo (Emcan) la llegada de los empleados. La mayoría de estos contratos tienen una vigencia de seis meses –excepcionalmente hay programas de 90 días– y los consistorios tienen libertad para elegir las actividades y la distribución de los peones a lo largo del año. «Normalmente, el 60% se suele incorporar en los seis primeros meses y después dan el testigo al 40% restante, que trabaja entre enero y junio», señalan desde el Ejecutivo, que espera que la cifra de desempleados que salgan de la lista del paro con la orden de corporaciones locales de aquí a julio suba de los 800 actuales hasta más de 1.200.

«Aquí dejamos una o dos personas para la segunda parte, pero la mayoría los metemos ahora, que es cuando hay que hacer más labores de eliminación de maleza, podas... En invierno los que reservamos nos vienen muy bien para poder limpiar las arquetas que se atascan con las hojas y la lluvia, pero ahora hay más que hacer», señala Javier Camino, que además de presidente de la Federación de Municipios de Cantabria es alcalde de Mazcuerras.

En lugares costeros como Comillas, que en verano tienen más población, más visitantes, más fiestas y más servicios, también se apuesta por reforzar el personal al inicio. Ya están trabajando por el pueblo cinco peones para la conservación y acondicionamiento de espacios urbanos y cuatro para la mejora de la salubridad de espacios públicos. El ayuntamiento se reserva los cinco restantes que le corresponden para que realicen labores de mantenimiento medioambiental entre enero y junio de 2025.

En esta localidad, como en la mayoría de Cantabria, el grueso de los trabajadores se integra en plantillas para realizar tareas de limpieza, mantenimiento de espacios públicos y jardinería, pero con estos recursos humanos adicionales también se refuerza la capacidad de ludotecas y campamentos de verano. Hay espacio para puestos técnicos y titulados de distintas ramas. La prueba es Santander, donde se incorporan 34 personas en la tanda de verano y 12 en la de invierno. En la nómina de elegidos hay guías turísticos, archiveros, educadores ambientales, informáticos, trabajadores sociales, arquitectos, psicólogos, ingenieros de obras... También monitores de ocio y tiempo libre. En Hazas de Cesto, dos de los doce contratos previstos se han firmado ya para reforzar el campamento de verano que organiza el Consistorio.

Más ejemplos concretos. El Ayuntamiento de Piélagos acaba de poner en marcha el programa 'Piélagos te acompaña', destinado a vecinos del municipio mayores de 80 años que vivan solos y adultos con discapacidad. Dos integradoras sociales, contratadas por el consistorio a través de la orden de Corporaciones Locales serán las encargadas de prestar el servicio para evitar el aislamiento no deseado y establecer una relación personal que, más allá del vínculo social, constituya una ayuda esencial para estas personas.

En total, la Consejería de Empleo repartirá 25,8 millones de euros (es un 1% menos que el año anterior) entre 119 entidades para llevar a cabo «actuaciones y servicios de interés general en sus municipios». Son 119 entidades porque, además de los 102 ayuntamientos, también participan 17 mancomunidades.

El reparto se hace en función de criterios de población, pero la orden realiza una discriminación positiva para apoyar más a las zonas rurales y a las localidades de la cuenca del Besaya, donde los índices de desempleo son más elevados. Así, Torrelavega es el ayuntamiento que recibirá en esta convocatoria una mayor cuantía económica, por encima de la capital. Serán 1.366.000 euros –casi 100.000 euros más que Santander– para dar una nueva oportunidad laboral a 74 trabajadores que se reparten entre seis proyectos. Los 23 primeros, que se encargarán de restaurar espacios degradados, se incorporaron la semana pasada y ya están en las calles después de realizar los cursos previos sobre riesgos laborales.

La orden de corporaciones contratará este año a 2.000 personas, frente a las 32.000 que nutren las listas del paro. En los peores años de la anterior crisis económica, cuando el número de desempleados en la comunidad autónoma estaba por encima de los 50.000, esta misma convocatoria de empleo promovida por el Gobierno autonómico llegaba a contratar a más de 4.000 cántabros. Ahora sigue siendo necesaria para dar una oportunidad laboral –además de la económica, también tiene una finalidad social– a los parados de larga duración. De hecho, este sector de la población tiene prioridad en las contrataciones, y dentro de él a los mayores de 45 años.

Los municipios pueden elegir entre hacer la selección de los trabajadores ellos mismos o que se los envíe el Emcan. En Los Corrales de Buelna han optado por lo segundo. Ahora, están analizando los perfiles para los programas de mejora de espacios públicos y de zonas naturales. «Hay gente que tiene perfil de oficial, otros de peón. Lo estamos mirando antes de salir a la calle», cuenta el concejal de Servicios, Alfredo Casanova, que celebra que la orden de corporaciones se siga convocando año tras años:«Son servicios muy necesarios y que dan resultado rápidamente. Los vecinos lo ven al momento y por eso son muy bien recibidos».

En Alfoz de Lloredo han optado por contratar ahora el 50% y a partir de enero al 50% restante, nueve operarios por temporada. «Tenemos siete pueblos y lo ideal sería tener dos por pueblo», cuenta la teniente de alcalde, Nieves Díaz. La pasada semana trabajaron en el pabellón de Oreña y en la playa de Luaña. Díaz sí reclama al Gobierno cántabro más control y que afine los criterios de selección, porque no todos los contratados llegan con la mejor actitud. «Hemos tenido casos de personas que no querían trabajar o que se han cogido la baja los seis meses. Ahora, algunos no tienen carné y tenemos que destinar a un funcionario municipal a moverles por el municipio. Algunos dan más trabajo del que quitan», lamenta.