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El daño está entre las vértebras L4 y L5. Es una hernia de disco al uso, que se ha operado hasta ahora abriendo lo que los cirujanos llaman una 'ventana' en la parte posterior de la columna y que implica un mínimo de 48 ... horas de ingreso postoperatorio. Pero el servicio de Neurocirugía de Valdecilla estrenó ayer una técnica novedosa que permite al paciente dormir en su casa el mismo día de la intervención. Se llama foraminoscopia y es menos invasiva y más segura, equiparable a cualquier otra de carácter ambulatorio, que elimina esa convalecencia en el propio hospital.
Bastó con un orificio de ocho milímetros para introducir los utensilios de los que se sirvieron los cirujanos en esta laparoscopia experimental, que sentará las bases de una nueva forma de intervenir estas lesiones medulares. «El objetivo que tenemos es que cada vez más pacientes puedan dormir en su casa el mismo día en que han sido operados», explica el jefe de Neurocirugía del Hospital Valdecilla, Rubén Martín.
La incertidumbre de la pandemia, con la actividad quirúrgica resentida en cada ola por la necesidad de liberar camas de hospitalización, ha llevado al Servicio Cántabro de Salud a potenciar aún más la cirugía mayor ambulatoria (CMA), que no requiere ingreso en planta. «Con esto no sólo estamos asegurándonos de que mantenemos la oferta de camas para lo realmente grave, sino que además mejoramos el bienestar de los pacientes, que en general siempre van a preferir dormir en sus casas a hacerlo en el hospital», asegura Martín. «Además, si logramos que puedan dejar el hospital es porque hemos practicado una cirugía menos invasiva, así que en líneas generales es un avance médico en todos los sentidos».
El doctor Daniel Iglesias, del Hospital Quirón de Zaragoza -experto en la materia-, supervisó los primeros pasos de una técnica que se realizó ayer por primera vez en Valdecilla para este tipo de lesión. «Accedemos a través del foramen que presenta la columna por donde transita el nervio». Entran con la máxima delicadeza, alcanzan la zona afectada, introducen un contraste para marcar el objetivo, que es el disco afectado, entre las vértebras L4 y L5. Luego dilatan mínimamente el espacio y cubren el nervio para protegerlo. Después trocean el tejido dañado y lo extraen poco a poco por ese mínimo espacio.
La operación duró tres horas y fue todo un éxito. «Todo este tipo de técnicas nuevas son un desafío para el cirujano, que debe actualizarse y aprender, pero es una necesidad para el paciente». Aproximadamente el 20% de las cirugías similares se realizaban hasta ahora de manera ambulatoria pero precisaban hospitalización domiciliaria. Pero con esta novedad no es necesario tampoco que el paciente se encuentre vigilado en casa como si estuviera ingresado. «Bastará con que cuide un poco la herida y la desinfecte con frecuencia», aclara Martín.
La laparoscopia se está generalizando en todos los ámbitos quirúrgicos. Requiere cada vez menos incisiones y son más pequeñas. La agresividad con los tejidos es menor y las nuevas tecnologías, como la robótica, el diseño 3D, la navegación o la realidad aumentada, están revolucionando el quirófano.
«La robótica es, sin duda, el futuro. Lo que ocurre es que aún no existe un aparato que sea lo suficientemente preciso como para servirnos para Neurocirugía. Aquí trabajamos con márgenes de error muy pequeños, casi inexistentes, y tecnologías como el Da Vinci aún no alcanzan esa precisión. Pero sin duda alguna es algo que va a llegar pronto, y deberemos estar preparados para ello», avanza el jefe de servicio.
Existen ya tecnologías aproximativas a este concepto. «Hay una técnica por la que escaneamos la columna y diseñamos en un preoperatorio la localización de los tornillos que deberán corregir los problemas óseos. Esa tecnología, cuando estamos en el quirófano, nos va señalando exactamente dónde van esos tornillos para que nosotros sólo tengamos que ponerlos». El desafío para los sanitarios será adaptar la curva de aprendizaje para llegar a tiempo en este mundo de constante revolución técnica. «El objetivo es que dentro de 40 años se repase lo que estamos haciendo ahora y lo vean como la Prehistoria. Eso significará que hemos mejorado y que operamos mucho mejor de lo que lo hacemos ahora».
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