Dos vuelos desviados y tráfico complicado en las autovías de Cantabria por la niebla

Una densa niebla se ha posado en el suelo esta madrugada en Cantabria, complicando la operatividad del aeropuerto y también la circulación en las carreteras de la región por la baja visibilidad durante las primeras horas del día. Han tenido que ser desviados dos vuelos: uno procedente de Edimburgo y otro de Roma, ambos operados por la compañía Ryanair. Los dos vuelos no han podido aterrizar y han sido desviados al aeropuerto de Bilbao. Sobre las 11.15 horas, Aena ha confirmado que el Seve Ballesteros ha recuperado la normalidad al mejorar las condiciones meteorológicas, con lo que no se esperan más incidencias por niebla.

Si hoy ha sido el aeropuerto de Santander el afectado por la niebla, ayer lo fue el de Bilbao, ya que la baja visibilidad provocada por este meteoro obligó a primeras horas del sábado a desviar tres vuelos que no podían aterrizar en Loiu al Seve Ballesteros de Santander, según informaron fuentes de Aena. Los aviones que al final tuvieron que tomar tierra en el aeródromo de la capital cántabra procedían de Valencia, Barcelona y Madrid.

A excepción de esos tres vuelos y durante el resto de la jornada, el aeropuerto bilbaíno pudo operar con total normalidad, según la misma fuente. Lo mismo ocurrió en las instalaciones del Seve Ballesteros, en las que durante la jornada del sábado no hubo problemas para el aterrizaje y despegue de los vuelos programados.

En cuanto al tráfico en las carreteras, a primera hora de la mañana la DGT advertía que prácticamente todo el trazado de la A-8 se encontraba afectado por este problema: desde Treto (Bárcena de Cicero) hasta Lamadrid (Valdáliga), entre los kilómetros 175 y 260 de la Autovía del Cantábrico.

También la Autovía de la Meseta ha presentado dificultades por esta baja visibilidad, sobre todo en el trazado que discurre desde el centro de Cantabria hasta el extremo sur. El tramo más difícil para circular ha sido el que abarca desde Las Caldas del Besaya (kilómetro 173) hasta Villasuso (en Anievas), kilómetro 166.

No obstante, la circulación por estas zonas presentaba 'nivel verde', el riesgo más bajo que advierte de 'circulación condicionada' en este caso por meteorología adversa. Sobre las once y media de la mañana, la circulación recuperó la normalidad y se eliminaron las advertencias.