Que El Niño traiga más suerte

El Gordo no dejó rastro en Cantabria (apenas 74.000 euros derivados de los premios mayores). Sabe a poco toda vez que los cántabros invierten cada año un poco más en el sorteo de Navidad. Quizá, como sentenciaba Martirio, una de las hijas de Bernarda Alba, 'la suerte viene a quien menos la aguarda'... Pero los jugadores cántabros son tozudos y saben que no está todo perdido: en el horizonte vislumbran ya El Niño, un sorteo del que tradicionalmente, y gracias a los reintegros, se dice que toca más. ¿Y qué premios tocan? Los más importantes son un primero de 2 millones por serie, y un segundo y un tercero de 750.000 euros y 250.000, respectivamente, también a la serie. En Cantabria se han consignado en esta edición 63.294 billetes, informa la Delegación de Loterías y Apuestas del Estado, que se traducen, a su vez, en más de 12,6 millones. El pasado año, cada residente en Cantabria se gastó una media de 22,37 euros en este sorteo extraordinario.

La comunidad hace cola estos días en las oficinas de lotería. Con más o menos intensidad que otros años, con más o menos fe, los cántabros hacen cola. En la Administración número 1 de Santander, en Calvo Sotelo, viven días de gran afluencia: gente en busca de números singulares; gente que compra para sí o para regalar; jugadores que buscan que la magia de 'La Anjana' -así se llama el establecimiento- les sea propicia, como ha ocurrido en años anteriores -en 2017, por ejemplo, aquí se repartieron cientos de décimos agraciados con el segundo premio de El Gordo-. El lotero José Luis Arrabal Horga se muestra contento con la marcha de las ventas y anima a seguir participando en un sorteo generoso «y mucho más repartido». Arrabal anima de palabra y obra: las anjanas, el espumillón y la música alegran la oficina. El sol también acompaña: «El buen tiempo influye. En Navidad, esto es gloria bendita».

Por lo general, los clientes se quedan con el billete tradicional, estampado este año con una imagen de la Adoración de los Reyes de Fray Juan Bautista Maíno, al que emiten las máquinas -«el papel moneda es más resistente»-; y buscan, además, terminaciones como el 5 o el 7, aunque el cero ha despertado tímidas pasiones después de que fuese la terminación premiada en el Gordo (el número 26590).

En la Administración número 3 de Torrelavega, sin embargo, los compradores se siguen decantando por números que acaban en 19 -como este año-, en 15, en 69. «La venta de Reyes está supeditada a la de Navidad», interpreta el lotero Luciano García, por lo que esta campaña, aunque las colas se sigan formando a las puertas del establecimiento de la calle Alonso Astúlez, está siendo un poco más floja que en ediciones anteriores. En cualquier caso, es difícil hacer una comparación interanual en esta administración: el año pasado repartieron 900.000 euros del Gordo, y distribuir premios en el primer sorteo de la Navidad empuja a la gente a comprar para El Niño. «Nos queda por delante una semana bastante fuerte», augura García. «Aunque las ventas algo se han resentido, esperemos que esta semana se anime más la cosa», añade.