Hasta el 60% de los niños hospitalizados en Valdecilla tiene infección respiratoria

Como consecuencia del aluvión de visitas, en gran parte derivadas del impacto del Virus Respiratorio Sincitial (VRS), que se tradujo en más de un 4% de ingresos, se llenó la planta de Pediatría (24 camas) y aumentó de forma preocupante la ocupación en la Unidad de Neonatología, con varios pequeños derivados a la Unidad de Cuidados Intensivos. Una situación que obligó a la Dirección a tomar medidas, dado que la epidemia de bronquiolitis no había hecho más que empezar. «Aún no hemos alcanzado el pico, la incidencia sigue subiendo, contamos que aún nos quedan dos semanas complicadas, de alta presión tanto en urgencias como en ingresos», señala María Jesús Cabero, jefa de Pediatría, servicio que ayer tenía a su cargo a más de 80 menores. Restando los recién nacidos en los últimos días –en torno a la decena–, el 60% de los hospitalizados responden a infecciones respiratorias, con el VRS como principal desencadenante (ocho de cada diez muestras analizadas a los niños con síntomas da positivo). Aunque no es el único. Los pediatras apuntan a la combinación de gérmenes en buena parte de los casos que se están atendiendo (rinovirus, covid...), y también a sobreinfecciones bacterianas, que son las que desembocan los cuadros más complejos.

«De los ingresados por infecciones respiratorias, entre el 70% y el 80% son menores de dos años», recuerda Cabero, el perfil más vulnerable ante el VRS al carecer de inmunidad. La infección se manifiesta con los síntomas de un resfriado, pero cuando pasa de las vías respiratorias altas a las inferiores aparecen la dificultad para respirar, la tos o las sibilancias, dando lugar a los casos de bronquiolitis y neumonía.

«Tenemos que ver cómo nos va el fin de semana, que puede ser peor incluso que el pasado, pero en principio estamos aguantando bien, ampliando camas en función de las necesidades. Hasta el momento no se ha tenido que interrumpir la actividad quirúrgica», indica Cabero. Para ganar capacidad (hasta doce camas más), la Dirección decidió desplazar la zona del Hospital de Semana de adultos, ubicada en la planta anexa a la de Pediatría, y repartir a estos pacientes en las plantas de la especialidad que les trata. La ventaja, como subrayó el gerente de Valdecilla, Rafael Tejido, a comienzos de semana, es que el incremento de la presión en Pediatría se produce en un momento en el que «el resto del hospital no está tan tensionado al haber caído ya la gripe y no estar dando demasiados problemas el covid».

«En Neonatología y en Intensivos tenemos más margen», añadió. De los menores ingresados ayer, cuatro estaban en la UCI, dos por complicaciones respiratorias y otros dos por otras causas. Esta escalada de ingresos derivada de la ola de bronquiolitis ha aumentado la estancia media de Pediatría, que «si habitualmente está entre los dos o tres días, en los casos que se complican, y que muchas veces requieren soporte respiratorio, se eleva a cinco o hasta siete días», añade la pediatra. Sólo en el mes de noviembre, han ingresado en la Unidad de Corta Estancia de Urgencias más de un centenar de niños con patología respiratoria. Los médicos insisten en extremar las precauciones con los más pequeños si hay hermanos mayores o adultos de la familia con síntomas catarrales.