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El aeropuerto Seve Ballesteros está operando este viernes con total normalidad en este tercer día de niebla densa al amanecer, que obligó a desviar varios vuelos tanto ayer como el miércoles ante la imposibilidad de los pilotos de aterrizar en el aeródromo cántabro.
La niebla ... de este viernes es diferente, más baja y menos tupida, sin afectar tanto como en los dos días pasados a la visibilidad de las pistas de aterrizaje.
Han llegado a su hora los tres vuelos previstos a primeras horas de la mañana, el Iberia que opera la ruta Santander-Madrid y los dos de Ryanair que enlazan con Bolonia y Viena. Buenas noticias, por tanto, para los pasajeros que esperaban la llegada de sus aviones cruzando los dedos en la terminal.
✈ Buen día para volar desde/hacia el #SeveBallesterosSantander ‼️
Amigos de Parayas (@AParayas) December 17, 2021
📸 @RaulGon77 desde el #Airbus 320 de @Iberia y al fondo el #Boeing 738 de @Ryanair_IT que partirá rumbo a #Viena pic.twitter.com/xDna9T4x7f
Situación actual en #LEXJ 08:14 niebla muy suave posada en la pista... hoy aterrizan bailando la macarena y tomando un café 🤣 pic.twitter.com/Wj0h4Lw1yu
VRG FOTOGRAFIA (@VrgFotografia) December 17, 2021
Esta niebla matutina sí que ha afectado antes del amanecer a la circulación en las autovías. Con dos tramos especialmente complicados: los 12 kilómetros entre Santander y Heras en la S-30 y otra veintena de kilómetros en la A-67 entre Torrelavega y Camargo. La falta de visibilidad ha señalado ambos puntos en 'nivel verde' -circulación condicionada-. Y precisamente, en el tramo señalado en la A-67 se ha producido un choque en cadena de tres vehículos a la altura de Piélagos. Fue sobre las ocho menos cuarto y ha provocado bastantes retenciones en sentido Santander.
Los expertos la denominan niebla de advección. Y se produce cuando masas de aire caliente y cargadas de humedad pasan sobre suelos fríos, lo cual hace enfriar el mismo aire, aumentando la humedad relativa y provocando finalmente la condensación. «Son frecuentes y abundantes en muchas costas y zonas marítimas del mundo», explicó el delegado de la Aemet en Cantabria, José Luis Arteche.
En Cantabria no es tan habitual esta niebla que se ha instado esta semana y que ayer no sólo dejó bajas temperaturas y una serie de imágenes espectaculares en diferentes municipios, sino que volvió a provocar incidencias en el tráfico aéreo.
«La niebla está cubriendo todo el Golfo de Vizcaya debido a que tenemos un anticiclón sobre el oeste europeo, en el norte de Francia. El aire del este y sureste está fluyendo hacia el mar, donde las temperaturas son bajas, de ahí que se produzcan estás condensaciones y haya capas bajas», explica Arteche.
El delegado de la Aemet asegura que estos fenómenos son «difíciles de pronosticar». Si bien matiza que la niebla no pasa más allá de unos pocos kilómetros tierra adentro. «Estas nieblas son bastante molestas para el Cantábrico porque los aeropuertos –desde el de Hondarribia hasta el de Asturias, pasando por el de Santander– están todos muy cerca del mar. Aunque no son muy frecuentes, afectan a la navegación aérea», justifica.
No obstante, Arteche anuncia que hay un cambio meteorológico de cara a este fin de semana. «Tenemos una borrasca que va a ser protagonista y que está al oeste de la península Ibérica, en la zona de Las Azores, que se va a acercar y va a traer viento sur. Eso va a suponer que no se produzcan estas nieblas. Hoy podría haber todavía alguna. Pero lo más probable es que no», explica.
El responsable de la Aemet avanza que mañana y el domingo «tendremos un tiempo muy agradable en la línea de estos últimos días, con muchas nubes». Para el comienzo de la semana que viene es cuando empezará a meterse algo de viento del sur y un tiempo un poco más borrascoso.
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