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Una de las cuestiones más inmediatas que debe resolverse en el macroproceso judicial que trata de dilucidar responsabilidades en la presunta estafa a unos ochenta clientes de la antigua oficina de Novo Banco en Santander tiene que ver con un aval. La titular ... del Juzgado de Instrucción Número 3 de la capital cántabra acordó hace un mes exigir una fianza de 19 millones de euros a la entidad por su posible responsabilidad en el perjuicio a los clientes de su exempleado, Jacobo Vidal. Un depósito en el juzgado para garantizar que, pase lo que pase, habrá dinero para responder. Lo que ha hecho Novo Banco es presentar un aval, pero propio. Avalándose a sí mismos. Y eso ha hecho que las defensas de los afectados impugnen la decisión. Porque si temían que la entidad podría no pagar o no disponer de solvencia (para eso solicitaron la fianza), su temor, ahora, se mantiene exactamente igual. Será la jueza la que decida si ese aval es o no «suficiente».
Lo que piden las defensas de las en torno a ochenta víctimas es que se deposite una cifra en metálico o un aval, pero de un tercero. Entienden que lo que ha entregado Novo Banco les deja en la misma situación que cuando solicitaron la fianza (que la jueza aceptó conforme a la petición de la Fiscalía). «Se mantiene el mismo riesgo», comentaban a este periódico fuentes cercanas al caso. De hecho, el escrito para impugnar este paso se presentó a principios del mes de septiembre.
Detrás de sus dudas, en un proceso llamado a alargarse y en el que los afectados tienen como principal objetivo recuperar su dinero, están los últimos movimientos empresariales en torno al banco portugués. No son nuevos. El negocio en España de la empresa lusa está en proceso de venta a Abanca, tal y como han recogido en numerosas informaciones los medios especializados. Y aquí, entre tanto, los antiguos clientes de Jacobo Vidal, que esperan recuperar lo perdido, temen que esas operaciones les dejen en el limbo. Porque la empresa financiera deberá responder cuando haya una decisión. Por eso, para garantizar los fondos, piden a la jueza la «insuficiencia» del aval presentado. Que se cumpla «el espíritu de la fianza».
Novo Banco respondió, en este sentido, a una pregunta de este periódico.
-¿En qué medida afecta al proceso la venta del negocio de Novo Banco en España?
-La venta del negocio de Novo Banco en España no tiene ninguna incidencia ni afectación en el proceso. La entidad sigue siendo la misma: Novo Banco, S.A.
Eso, llevado a las dudas sobre su aval, supone decir, como ya han expresado en otras ocasiones, que garantizan su solvencia económica -«Novo Banco garantiza de forma inequívoca su solvencia para hacer frente a las indemnizaciones», respondieron ya a El Diario sobre este asunto en noviembre del año pasado-.
La decisión sobre el aval, se supone, no tardará en producirse. Los afectados esperan, de hecho, que llegue antes de una semana decisiva para el proceso. La primera del mes de noviembre. El día 2 está llamado a declarar nuevamente Jacobo Vidal. Hay que recordar que el principal investigado en la presunta estafa ha permanecido en este tiempo en libertad, pero con el pasaporte retirado y la obligación de presentarse periódicamente en el juzgado. Volverá a someterse a las preguntas un año después de su primera citación.
Justo un día después será un representante de Novo Banco el que pase por el Juzgado. La entidad, en calidad de investigada, está citada a declarar el día 3, aunque impugnaron en su momento esta decisión.
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