Las obras del nudo de Torrelavega estrenan nuevo desvío provisional en Barreda

La actuación se enmarca dentro de las obras del nudo de Torrelavega, en las que se está construyendo un nuevo sector de autovía entre Sierrapando y Barreda -el conocido como ramal de continuidad- para conseguir desdoblar la A-67, que discurre hacia la Meseta, y la A-8, que atraviesa transversalmente la región, y que hasta ahora se solapaban durante un par de kilómetros.

El ministro de Transportes, Óscar Puente, dejó claro julio durante su visita a la zona que esta iba a ser la tónica mientras durasen los trabajos, que según sus palabras deberían estar finalizados por completo para el «próximo verano». Puente excusó el enorme retraso acumulado -la obra empezó en 2018 con un plazo de ejecución de 3 años y cuatro meses- debido a la «gran complejidad técnica» del proyecto.

Además, incidió en el hecho de que desde un primer momento el Ministerio optase por trabajar sin cerrar por completo las autovías al tráfico. Esto les obliga cada vez que es necesario a acondicionar nuevos desvíos provisionales.

Los usuarios de la A-67 que se dirigen estos días hacia Torrelavega se encuentran con que deben girar levemente hacia la izquierda para recorrer un pequeño nuevo trayecto que ha sido reacondicionado y que discurre paralelo a la infraestructura que en un futuro unirá Rinconeda y Sierrapando a través del nuevo ramal de continuidad por los falsos túneles. Después, un otro giro, esta vez hacia la derecha, les devuelve hacia el trazado original de la A-67.

El nuevo desvío recién estrenado se une al que el mes pasado se puso en servicio justo en el sentido contrario -Torrelavega-Santander-, que obligó a cerrar el tránsito durante dos noches.