Optimismo prudente en el Gobierno de Cantabria

Entre los elementos destacables figura, a su juicio, el incremento de los contratos a jornada completa (un 3%). «Hay que remontarse unos cuantos años atrás –hasta 2008- para ver en Cantabria unas cifras de paro tan bajas, con una tasa de desempleo en el 9%», ha señalado la consejera.

Otros datos positivos que ha destacado la consejera son el descenso del paro juvenil, que ha disminuido un 3,5% en los últimos doce meses, y la notable bajada entre quienes buscan su primer trabajo o hacía más de un año que estaban en desempleo –parados de larga duración-, cuya disminución es del 44,4%.

A todo ello ha sumado que la ocupación de las mujeres «sigue al alza» y ha valorado así que «damos un paso más hacia la incorporación real y efectiva de las mujeres al mercado de trabajo, un terreno en el que todavía tenemos mucho en el que avanzar», ha añadido.

No obstante y pese a que la EPA deja «muchos datos que invitan a ser optimistas y por los que el Gobierno de Cantabria podría sacar pecho», Ana Belén Álvarez prefiere ser cauta, reconoce que la calidad del trabajo «todavía no es la más deseable» y muestra su preocupación por el descenso de la población activa (-2,5% interanual).

La titular de Empleo, que tomó posesión del cargo hace dos semanas, ha aprovechado la valoración de los datos de la EPA para garantizar su «compromiso» por impulsar políticas activas que favorezcan un crecimiento sostenido del empleo y ha reiterado la «mano tendida» del Gobierno a sindicatos y patronal para «construir juntos una Cantabria con más empleo estable, de mayor calidad y con salarios dignos».

«Desde el Gobierno de Cantabria no lanzamos las campanas al vuelo; somos conscientes que queda mucho por hacer y nuestro compromiso es ese, trabajar sin descanso para que nuestra Comunidad Autónoma siga estando a la cabeza de España y para que el empleo sea cada vez más estable y de mayor calidad», ha concluido la consejera.

Por su parte, el secretario de Empleo de UGT en Cantabria, Julio Ibáñez, aseguró que el descenso de más de un 26% del desempleo en la región en el segundo trimestre de este año «enmascara un mercado laboral cada vez más precario, con ya una cuarta parte de su población asalariada con un contrato temporal y con aspectos negativos cada vez más preocupantes«.

Ibáñez agregó que «este notable descenso del paro responde a un incremento de 7.200 empleos en el trimestre, aunque todos ellos son temporales porque el número de asalariados con un contrato eventual crece más de un 20% (+8.500) mientras desciende el de los que tienen un contrato indefinido (-900) y los ocupados no asalariados o autónomos (-400)».

«El balance del empleo generado en este segundo trimestre del año en Cantabria es de por sí llamativo y confirma que la región tenga ahora a una cuarta parte de sus asalariados con un contrato temporal y que tengamos el mayor número de ellos desde 2008», precisó el sindicalista, que reiteró que «una cosa es que descienda el paro y otra bien distinta es que lo haga de manera sólida y con un empleo mínimamente estable«.

El responsable regional de Empleo de UGT insistió en que «con una reducción del paro con estos condicionantes es evidente que volveremos a verlo subir cuando todo este empleo temporal finalice con la campaña veraniega«, tras recordar que »el paro desciende pero también lo hace la población activa, lo que es un indicador bien claro de que el mercado de trabajo de Cantabria no funciona correctamente».

La bajada de la tasa de paro hasta situar a Canabria en el 9,01% «es sin duda un buen dato pero no deja de responder a otros factores que ningún caso ayuda al optimismo» indican desde USO. «La EPA refleja una bajada de la población activa que sigue sin tocar fondo, especialmente en el sector del empleo femenino«.

Cantabria, destacan, tiene una tasa de actividad del 54,46%, 4 puntos menor que la media española. «Solo durante el último año la tasa de actividad de la mujer cántabra ha descendido un 2% hasta situarse en el 48,04%» . Esto quiere decir, indican, que casi 5.000 mujeres han desistido de buscar empleo en los últimos doce meses y por tanto no contabilizan como paradas ayudando a maquillar las cifras del desempleo.

Para USO, por tanto, la cifras macro del empleo regional son «aceptables» en la última oleada de datos ofrecidas por el INE, pero «debe resultar alarmante el número de cántabros que bajan los brazos y desisten de buscar empleo por falta de oportunidades».

«Los datos del II Trimestre nos advierten nuevamente que la recuperación económica que ya están viviendo las empresas de Cantabria no está repercutiendo en la población trabajadora, que se encuentra instalada en la precariedad, dependiendo de empleos en el sector servicios como el turismo que no genera empleo estable y para todo el año, mientras vemos que los sectores motor como la industria continúan perdiendo empleos y población trabajadora», explica Laura Lombilla, secretaria de Empleo de Comisiones Obreras de Cantabria, que pone la pérdida de empleo de calidad en la región en el punto de mira.

Para CC OO la comparativa de los datos de esta encuesta con la del II Trimestre de 2008 es clave para realizar un análisis real de lo que está ocurriendo en nuestra región, en la que «lamentablemente se continúa sufriendo la pérdida de empleo de calidad por empleo vinculado a la precariedad y a la estacionalidad, donde la alta rotación en la contratación sume a las personas en una extrema inestabilidad». «Frente al triunfalismo de la recuperación económica continuamos peor que al inicio de la crisis. Desde 2008 el goteo en la pérdida de puestos de trabajo de calidad es imparable y las cifras son contundentes, hemos perdido 10.400 puestos de trabajo en el sector industrial y 13.300 en la construcción, unos empleos necesarios para la estabilidad de nuestro mercado de trabajo», ha apostillado Lombilla.

El PP ha advertido hoy de que Cantabria «sigue expulsando trabajadores del mercado laboral y crea empleo a un ritmo inferior a la media nacional«.

«Si Cantabria creara empleo al mismo ritmo que España e igualara la tasa nacional de ocupación habría 5.000 personas más trabajando», ha afirmado el diputado del Grupo Popular Lorenzo Vidal de la Peña.

En un comunicado ha llamado la atención sobre la «reducción constante» de la población activa que refleja «trimestre a trimestre» la EPA, y que explica -según señala- en parte la reducción del paro en la región, puesto que «si no hay gente en disposición de trabajar tampoco habrá parados».

Según Vidal de la Peña, el dato de paro del segundo trimestre «puede parecer positivo», pero está «maquillado» por el «empeoramiento» de la tasa de actividad, que es «la segunda peor de España». «En las islas desiertas no hay paro», ha apostillado.

Vidal de la Peña ha apostado por evaluar y repensar unas políticas activas de empleo que «no funcionan», con programas específicos para los parados mayores de 44 años, casi 20.000 personas que tienen cargas familiares y no cotizan a la Seguridad Social, con lo que están «condenados a ser jubilados pobres».