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Daniel Martínez
Santander
Miércoles, 28 de octubre 2020, 15:02
El Gobierno de España y concretamente el Ministerio de Transición Ecológica debe dar los pasos necesarios para garantizar a Santander y todo el Arco de la Bahía el abastecimiento durante los meses de verano a través de la captación de agua del pantano del Ebro ... . Es la exigencia que saldrá adelante este viernes por abrumadora mayoría del Congreso de los Diputados gracias a un acuerdo a tres bandas poco común tanto en Cantabria como en Madrid entre el PP, el PRC y el PSOE, al que posteriormente se unió también Unidas Podemos.
Todo partió de una moción presentada por el regionalista José María Mazón, que sumó las aportaciones de los diputados Pedro Casares (PSOE) y Elena Castillo (PP). Al texto inicial se vio modificado por la enmienda socialista que insta al Gobierno de España a acordar una primera transferencia de 4,99 hectómetro cúbicos en los mismos términos que se transfirió este verano de forma apuntual, tras el acuerdo del Consejo de Ministros del pasado 4 de agosto de 2020.
Pero además, siguiendo el espíritu de la moción regionalista, la enmienda también insta a firmar con carácter urgente la autorización especial adicional -sobre lo anterior- para que pueda ponerse en servicio la derivación de aguas desde el embalse del Ebro que se necesite hasta ese tope de los 25,23 hectómetros cúbicos anuales con sujeción a lo que sea estrictamente exigible al Gobierno de Cantabria de acuerdo a la normativa vigente en materia de aguas. Esta segunda cantidad sí tendría que devolverse durante los meses húmedos de invierno.
Un paso «importantísimo» para Casares y «muy positivo» para Mazón, que considera que «es lo mínimo que merecemos» después de «lo que se sufrió» en la comarca de Campoo para tener un pantano «que apenas podemos aprovechar en Cantabria». «Se trata de defender y garantizar el agua a los municipios de la Bahía de Santander, y por extensión a toda Cantabria», apuntó Castillo, que entiende que «los cántabros necesitan ver solucionado de una vez por todas».
«Los diputados de este Congreso, llegando a ese acuerdo, hemos puesto por encima de los intereses de cada uno, los intereses del conjunto. Hemos dado respuesta a un problema de la mejor manera posible, acordando su solución, alcanzando con altura de miras el objetivo que debíamos marcarnos que no era hacer una guerra en torno al agua, sino buscar la solución que la garantice», concluyó Casares, que agradeció al Gobierno de Pedro Sánchez que «nunca nadie se haya quedado sin agua en Santander» y avanza que con él al frente del Ejecutivo seguirá estando garantizada a futuro.
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