El Parlamento inicia el cambio de su reglamento para adaptarlo a la Ley de Transparencia

Todos los grupos políticos, que este martes han votado a favor de la iniciativa de la presidenta del Parlamento, María José González Revuelta, tienen ahora una semana para nombrar a sus representantes en la ponencia que se ocupará de desarrollar los trabajos. Además, en el plazo de un mes, deberán poner sobre la mesa las propuestas concretas de modificación para su estudio.

«Es un reglamento que se ha quedado anticuado. Un reglamento del siglo XX», afirmaba el portavoz del PRC, Pedro Hernando. El regionalista no solo hacía referencia a lo relativo a las políticas de transparencia, también a otros aspectos como el funcionamiento de las sesiones plenarias y las comisiones de área. En estos momentos, en ocasiones, desde que un grupo política registra una iniciativa hasta que se debate en el hemiciclo pueden pasar tres semanas. Es decir, que cuando los partidos marcan su posición y dan instrucciones al Ejecutivo dentro de su labor de impulso al Gobierno de Cantabria el tema ya está más que olvidado. Como apuntaba el portavoz popular, Juan José Alonso, la idea es agilizar la llegada al Parlamento de cuestiones de actualidad «para que no se demoren mucho en el tiempo».

Agilizar la llegada de los asuntos, pero también los debates para conseguir dinamizar la vida parlamentaria. En cuanto a tiempos de intervención, agrupando temas similares, reduciendo turnos de réplica cuando no sean necesario... Porque ahora se dan situaciones tan anómalas como que si dos grupos llevan dos iniciativas similares, se debaten dos veces en puntos distintos y los diputados tienen que subir dos veces a la tribuna para repetir lo mismo.

Con el cambio del reglamento también se quieren oficializar algunos usos y costumbres que han aprobado la Mesa del Parlamento y la Junta de Portavoces ante el vacío normativo que existía. En este sentido, González Revuelta propuso designar un letrado encargado de recopilar todos estos acuerdos que se han adoptado en las últimas dos décadas para ver cómo introducirlos en el reglamento, así como analizar las reformas que han llevado a cabo otras cámaras autonómicas en los últimos años por si pudieran adaptarse al documento cántabro.