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El año pasado, a estas alturas, el Gobierno de España ya tenía prácticamente cerrados los Presupuestos Generales del Estado de 2023, que se presentaron en el Congreso de los Diputados a principios de octubre. Ahora no solo no hay un borrador de las Cuentas, ... sino que todavía no se sabe quien encabezará el próximo Ejecutivo ni si será necesaria una repetición electoral. Por eso el escenario más probable es el de la prórroga del Presupuesto. «Los tiempos son muy ajustados», reconoció ayer la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que dejó abierta la puerta a tener una ley presupuestaria nueva el próximo ejercicio en caso de que la investidura de Pedro Sánchez salga adelante «pronto». Para Cantabria no es un tema inocuo porque, en caso de que finalmente se prorroguen las Cuentas, la comunidad autónoma se quedará sin las partidas para el Mupac y La Pasiega de las que sí ha disfrutado en 2022 y 2023. En total 44 millones de euros a razón de 11 millones por año y proyecto. Al tratarse de una transferencia a otra Administración para sendas iniciativas que no dependen directamente del Estado, este dinero legalmente no puede llegar.
En cualquier caso, el Gobierno de España no estaba obligado a colaborar con Cantabria en la financiación del Museo de Arqueología y Prehistoria y del centro logístico de Parbayón. No existe ningún acuerdo al respecto, sino que se la decisión se toma año a año y depende de la voluntad de Madrid y de la capacidad de Peña Herbosa para presionar. Voluntad parece que sí había, tal y como manifestó la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, durante el acto en el que se puso la primera piedra de la obra de La Pasiega el pasado 5 de septiembre.
De hecho, no es para nada habitual que el Ministerio de Hacienda envíe a las comunidades dinero para sufragar proyectos impulsados por los ejecutivos autonómicos, y la prueba es que este año solo ha ocurrido con Cantabria -por partida doble, porque también hay 33 millones para saldar la deuda de Valdecilla- y La Rioja. De los 44 millones comprometidos en los dos últimos años han llegado los 22 primeros y están pendientes los de este 2023. El bipartito dejó cerrado antes de las elecciones el convenio con el Estado para la transferencia, pero no terminó el trámite. No está firmado el documento, el último paso para recibir el dinero. Como apuntó a principios de mes la presidenta regional, María José Sáenz de Buruaga, ya ha dado la orden al titular de la Consejería de Economía, Luis Ángel Agüeros, para que acelere todo lo posible este proceso.
El departamento de Economía es el que también tendrá que ver ahora cómo sigue pagando las obras en marcha del Mupac y La Pasiega sin la colaboración nacional. En el caso del centro logístico, Buruaga ya ha dicho que en los Presupuestos regionales habrá una partida de 10 millones de euros y que se habilitará una línea de crédito con el Instituto Cántabro de Finanzas (ICAF) por si hubiera que recurrir a él.
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