Secciones
Servicios
Destacamos
G. B.
Domingo, 12 de septiembre 2021, 07:18
-¿Habría que parar, detenerse para empezar otra etapa?
-Parar, nunca. Hay que pelear para que se reforme el estatuto y para que se dote a la UIMP de una cierta autonomía. No tiene sentido que la UIMP sea una universidad convencional.
-Y, ... en paralelo, en este tiempo, ¿ha perdido identidad la UIMP?
-La palabra identidad es muy de tesis doctoral y muy complicada. La UIMP tiene que redefinir su papel en el sistema universitario español. La tendencia es pensar que cualquier tiempo pasado fue mejor y que las instituciones son inamovibles. La pregunta es por qué asistir a un curso de verano en Santander, o en el Escorial, o en Carmona, si me puedo conectar y hacer uno de La Sorbona, Harvard..., incluso gratuito. ¿Cuál es el plus, que creo que lo hay, o qué tipo de oferta deben hacer estos cursos de verano para atraer a nuevos públicos? La UIMP creo que puede tener un papel protagonista dentro del sistema y el equipo trabaja en ese sentido. La UIMP tiene que cambiar si no quiere acabar siendo absolutamente irrelevante. El mundo, las demandas de cursos, las necesidades de programación y los hábitos del verano han cambiado.
-¿Cómo es su relación con la alcaldesa Gema Igual?
-La relación institucional con el Ayuntamiento de Santander es buena, como no podía ser de otra manera. Trabajamos con un convenio y la UIMP se hace cargo de todos los gastos de mantenimiento. Unos costes considerables pero conscientes de que tenemos un lugar privilegiado. Hay los problemas lógicos de estar en un parque público. Este año ha habido 24 conciertos que debido a la pandemia han acabado pronto, pero en mi primer año ya tuvimos quejas por escrito de ponentes y directores porque resulta difícil compaginar horarios de clases y de los trabajadores con los conciertos.
-En el caso de la distinción fallida a la presidenta de la Fundación Albéniz, ¿hubo un cúmulo de torpezas en el proceso?
-No, para nada. En nuestro caso en febrero vimos las posibles candidaturas para el doctorado y defendí personalmente a Paloma O'Shea por su trato exquisito y por su impulso a las actividades culturales. Se miró el reglamento e hicimos las consultas jurídicas pertinentes. No ha habido ninguna torpeza.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.