Los pescadores rechazan que haya cámaras en sus barcos: «Creen que somos delincuentes»

Este jueves representantes del sector de altura y bajura del Cantábrico mantuvieron un encuentro en Ondarroa, convocados por la organización de productores de pesca (Oppao), con el objetivo de hacer un frente común ante el nuevo reglamento comunitario aprobado con el objetivo de perseguir y penalizar las capturas ilegales y no declaradas.

Aunque las medidas se aplicarán de manera gradual, «una vez más resulta evidente que Bruselas está muy lejos de los pescadores, porque aún teniendo voluntad de cumplir la normativa, resulta dificilísimo y en muchas ocasiones, inviable en un pesquero», manifestó Alberto Rentería, de la Organización de Productores de Pesca de Altura de Cantabria (Opeca), según recoge El Correo.

El malestar por la obligación de aplicar estas medidas es generalizado entre las cofradías de pescadores de Cantabria, cuyos representantes han asistido hace unos días a unas ponencias celebradas en Santander, en las que les han dado todo tipo de detalles sobre la nueva normativa. «Esto supone más burocracia y hace prácticamente imposible salir a la mar», afirma, Adolfo San Román, patrón de la Cofradía de Pescadores de Laredo, que critica que, a la ahora de poner en marcha este tipo de medidas, «no nos tengan en cuenta a los profesionales del sector». En este sentido, San Román apunta que una de las exigencias, «sin sentido», a la que tienen que hacer frente ahora es notificar las capturas cuatro horas antes de llegar a puerto, por si hubiese una inspección. «Eso supone que si estamos pescando, como esta primavera, a una hora del puerto, ¿qué tenemos que estar fondeados o esperando fuera tres horas para entrar a puerto?».

Pero si hay algo que realmente molesta el patrón del cabildo pejino es la obligación de tener que instalar cámaras, al estilo 'Gran Hermano', en sus barcos. «Creen que somos delincuentes. ¿Por qué no las ponen en los despachos de los responsables de la Unión Europea? Ya no respetan nuestra intimidad».

El patrón de la Cofradía de Pescadores de Santoña, Miguel Fernández, que avanza que ya hay dos barcos en Cantabria que han instalado las cámaras, también cree que estas obligaciones van en contra del sector. «Hay más gastos en controlar que en mejorar el sector. En vez de mejorar estamos empeorando porque ya había suficiente control».