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Mareas de bañistas han ido tomando las playas de Santander a medida que ha ido avanzando la mañana, en este martes de sol justito y bastantes nubes con temperaturas suaves, apenas superando los veinte grados cuando buena parte del país se está cociendo a treinta ... y tantos. Hoy se dice que estamos en la víspera de la tórrida ola de calor que mañana amenaza con subir de 45º los termómetros en determinados puntos de la la península. El área cantábrica se librará del sofoco, aunque sí que subirá algo la temperatura. En la costa, hasta 23º, todo un regalo en este verano atípico con tantos días con mal tiempo.
Volviendo a las playas, las más grandes de la capital cántabra son las que más gente aglutinan en sus largas extensiones de arena fina. Tal y como puede comprobarse en la web playas.santander.es, las de El Sardinero han estado a punto de colgar el cartel de completo a la una de la tarde. El aforo roza el límite máximo permitido por las medidas sanitarias en la Primera y la Segunda de El Sardinero. La Concha, Mataleñas y La Virgen del Mar también estaban casi llenas a esa hora. Así que, antes de elegir lugar en el que extender la toalla, conviene consultar estos datos para no tener que hacer cola. Por ejemplo, hoy merece la pena dirigirse a las playas de Bikinis (con solo un 13% de ocupación a las 13.30), La Magdalena (apenas alcanza el 33% en este momento) o incluso Los Peligros (55%). Y rehúse darse el paseo hasta Los Molinucos. Esta pequeña cala, en la que no caben más que un par de familias, es la única que a estas horas ya presenta 'nivel negro' (aforo completo).
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En nuestra web puede comprobar el estado de las playas más importantes de Cantabria viendo imágenes en tiempo real, a través de las webcams, para no llevarse el chasco de encontrársela cerrada por aforo completo después de hacer el viaje a ese arenal de ensueño. Es la una de la tarde y la siempre concurrida Brazomar, en Castro Urdiales, ya está de bote en bote. Sin embargo, la también castreña de Oriñón presenta espacio de sobra para gozar del día sin pisar a nadie. La paradisiaca Trengandín (Noja) hoy parece una abarrotada playa levantina, igual que la vecina Ris, donde al menos desde la perspectiva que ofrece la webcam da la sensación de no caber ni un alfiler. En la zona de Miengo, el panorama está algo más despejado, con mucho sitio entre toallas en Cuchía. Y en la impactante zona de Oyambre y también en Liencres tal vez se pueda probar suerte, con playas muy animadas pero no atiborradas... de momento.
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