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La Policía es parca en sus manifestaciones: «Estamos trabajando y el agresor está pendiente de ser detenido»; pero lo cierto es que desde que el pasado jueves un joven de 20 años propinara una brutal paliza a un médico en el centro de salud de ... Los Castros de Santander, han transcurrido ya seis días sin que las investigaciones den resultado.
«No es una persona con un perfil que pueda coger un billete y huir a otro país. Lo lógico es pensar que está escondido en algún sitio y que está esperando a salir, probablemente, a que amaine un poco todo el revuelo mediático», revelan fuentes cercanas a la Policía Nacional. Las mismas que atestiguan que está totalmente identificado pero no localizado. Que hay una orden de búsqueda y captura y detención a nivel nacional, y que se han tomado declaración tanto a la víctima como a los testigos del suceso. Desde el mismo día de la agresión -el pasado jueves- todas las unidades de seguridad ciudadana cuentan con una fotografía del chico.
«Lo que tenemos que hacer, creo, es dejar trabajar a los agentes, que en todo momento se han portado muy bien con nosotros», manifiesta Javier Hernández de Sande, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Cantabria. Aunque en el colectivo sanitario comienza a sentirse el descontento porque transcurren los días sin que se localice al agresor.
El médico agredido se recupera «más lento de lo esperado» de sus heridas. «Tengo la cara algo menos inflamada y se está reabsorbiendo el derrame; pero va muy lentamente. Aún es pronto para saber cuál va a ser la evolución», cuenta el doctor, que al principio tuvo miedo hasta de salir a la calle. «¿Quién podía garantizarme que no vendría a por mi de nuevo?». La Policía se niega informar si el agresor está en paradero desconocido o sólo pendiente de ser detenido; pero ha confirmado al médico que no debe temer por su integridad.
En cuanto hubo orden judicial contra el agresor, los agentes se personaron en su vivienda, pero no lo localizaron. Lo que si se sabe es que este individuo acudió al mismo centro de salud hace cinco meses para protagonizar otro episodio similar. En aquella ocasión no hubo que lamentar daños personales porque el hombre logró imponer su voluntad al acceder a un área restringida por peligro de contagio por covid; pero ese hecho sirvió para que lo ficharan.
Al hilo de este suceso se ha reavivado el debate sobre la posibilidad de cambiar el protocolo de actuación ante este tipo de actuaciones. Se plantea que pueda ser el mismo que se sigue en los casos de violencia de género para poder detener al agresor lo antes posible.
«No puede ser que la Policía no detenga al agresor en el momento y vaya en su búsqueda una vez he puesto la denuncia, horas después de sufrir una brutal paliza», afirmó el médico agredido.
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