Preparativos para vivir la Semana Santa desde la fe

«Desde que nací formo parte de la cofradía. Lo que más me gusta es el sentimiento de unión entre los cofrades y entre todas las cofradías», asegura. La principal misión con la que salen es «catequizar, es decir, dar catequesis en la calle a la gente que se une y que quiere vivir la Semana Santa».

Por su parte, Cantia Rivero, de la Cofradía de La Esperanza, sale en procesión desde que tenía apenas 2 años. «Toda una vida», resume cuando ya ha cumplido 24. Ha empezado a ser portadora del paso de la Virgen de la Esperanza, que sale el Lunes Santo, y cuyo momento más emotivo es cuando llevan la imagen de la virgen al Hospital Valdecilla. «Es un símbolo de esperanza y es emocionante cuando se asoman a recibirnos los enfermos y el personal sanitario», comparte.

Los preparativos implican muchas horas de dedicación. «Cada tarde casi todos nos reunimos al salir del trabajo para ayudar con los preparativos. Se aprende mucho, lo pasamos bien y después de tantos años se crea una hermandad y realmente nos sentimos como una segunda familia», continúa Cantia.

Una de las formas más tradicionales de vivir la Semana Santa desde dentro es como costalero: sacando a costal el paso cargando en el cuello. Es el caso de Juan Coria, de la Cofradía de Los Pasionistas, que sale cada Viernes Santo en la ceremonia del Descendimiento de la Cruz: «Es un sentimiento que no se puede expresar con palabras».

Coria, sevillano de nacimiento, empezó a procesionar a los 17 años y ya lleva 23 años como costalero, una función que requiere de fuerza física, puesto que cargan con 2.000 kilos entre 35 hombres y dos mujeres. «Es un orgullo que las mujeres formen parte de esta tradición», añade. Ataviados con su faja y las zapatillas adecuadas ensayan y se ponen en forma para el gran día, la procesión del Viernes Santo con la Virgen de la Amargura. Lo que más le gusta de ser cofrade es «sentirte los pies de Dios en la tierra, que es un privilegio» y «los valores que nos unen de bondad, amor, caridad y actos benéficos».