La prórroga de los Presupuestos del Estado deja a Cantabria con nueve millones menos al mes

Esta es la segunda vez en dos años que el Gobierno del PSOE decide reciclar los Presupuestos del año 2023. Es decir, el país funcionará con las cuentas hechas para un contexto económico muy distinto al actual, en el que la Guerra de Ucrania disparó los precios y las cifras de empleo eran bastante peores que las actuales, por ejemplo. Todavía hay una oportunidad de que Sánchez saque adelante las cuentas, en abril o mayo, aunque la opinión generalizada es que ocurrirá como en 2024 y la prórroga ocupará todo el año.

El Gobierno de Cantabria, que sí aprobó su nuevo Presupuesto el pasado diciembre tras pactar con el PRC, estima que el primer golpe llegará con las entregas a cuenta: el dinero del IVA, el IRPF, la financiación autonómica y otros impuestos que el Estado adelanta a las comunidades y con el que Cantabria cuenta para sus gastos e inversiones. Moncloa necesitará un Real Decreto para actualizar las cantidades, pero mientras no lo haga, la región recibirá la misma cantidad que el año pasado (2.564 millones) en lugar de los 2.666 millones apalabrados en el Consejo de Política Fiscal del pasado julio. Es decir, Cantabria dejará de ingresar casi nueve millones de euros al mes que ya estaban previstos.

«Hasta mayo o junio no nos supondrá tensiones de tesorería, pero podrían aparecer si no hay actualización de las entregas», señaló a este periódico el consejero de Economía, Luis Ángel Agüeros. El responsable de las cuentas cántabras reconoce que esta doble prórroga presupuestaria les obligará «a vigilar el ritmo de la ejecución» durante el año. «Los ingresos del Estado llegarán, sí, pero con cierto retraso y en muchos casos con los importes congelados en un contexto en el que los gastos sanitarios, de farmacia, los costes de materiales y de ejecución de obras y otras prestaciones sociales sí se ven afectados por los efectos de la inflación», lamentó el consejero.

La ausencia de un nuevo Presupuesto provocará más daños colaterales en Cantabria, además de la bajada de los ingresos. Proyectos estratégicos como La Pasiega y el Mupac se quedarán sin subvenciones nominativas, al igual que ocurrió el año pasado. En 2023 sí se recibieron 44 millones para estas obras y Valdecilla. «Ahora no podemos esperar que lleguen y trabajamos en ese supuesto, en ningún caso corren peligro estos proyectos», añadieron desde la Consejería de Economía.

También pueden sufrir retrasos los planes para soterrar el tráfico ferroviario en Torrelavega y Camargo. ADIF tendrá que hacer modificaciones presupuestarias para poder habilitar créditos -que no tenía previstos en sus gastos de 2023- y poner, así, su parte de la financiación. Esto puede demorar los plazos de un proyecto que alcanzará los 142 millones de euros de coste.

El empleo público también se verá afectado por la doble prórroga presupuestaria en Madrid. Según los cálculos que maneja el Gobierno de Cantabria, los funcionarios empezarán el año sin nueva actualización de las nóminas y, mientras no haya Presupuesto nuevo, se congelarán los sueldos en el importe del año pasado más el 0,5% del IPC de 2024. Es decir, no habrá actualización del sueldo en 2025.

Tampoco será posible cumplir con las necesidades de contratación que reclaman las fundaciones y las empresas públicas. «Se oye desde hace dos años que el Estado quiere eliminar la tasa de reposición porque las plantillas están muy envejecidas y hace falta renovarlas, pero mientras no se recoja esa circunstancia en unos nuevos Presupuestos, sigue vigente la tasa de 2023», explicó Agüeros, lo que imposibilita contratar nuevos empleados con contrato indefinido.

Mientras tanto, la fecha de la próxima reunión del Consejo de Política Fiscal sigue sin cerrarse. Será una cita clave para abordar la polémica propuesta de la quita de la deuda hecha por Sánchez en la Conferencia de Presidentes de La Magdalena, así como el nuevo modelo de financiación autonómico.