«Que no, que no quiero un trabajo»

Generalmente se hacen pasar por un portal de búsqueda de empleo y la voz de mujer –uno lo escucha si no cuelga a los cinco segundos, que es lo más frecuente– explica que están interesados en tu perfil. Lo normal es darse cuenta de que algo raro ocurre porque ni siquiera has enviado un currículum, pero el que está en el paro... El paso decisivo de los estafadores es dar un teléfono para seguir la conversación por Whatsapp. Mal asunto. Porque si lo hacen es que les funciona. Que alguno, desesperado, pica.

Policía Nacional y Guardia Civil ya indicaron a este periódico hace unos meses que los intentos de estafa por teléfono (incluidos en los casos genéricos de ciberestafa) siguen «en auge». Este ahora es de los más frecuentes. Está el de la advertencia de un corte de luz, el del envío de un falso técnico al domicilio, el de la multa de tráfico que hay que pagar inmediatamente o el del paquete de Correos...). Pero este se ha disparado en las últimas semanas. Lo habrá palpado en su propio teléfono o habrá escuchado a alguien cerca soltando un «que no, que no quiero un trabajo» o «que no he enviado ningún currícullum». «Ya están otra vez los del trabajo...». Hay usuarios que hablan de «bombardeo», «con llamadas incluso pasadas las once de la noche». Siempre iguales, siempre el mismo procedimiento, aunque cambien de número. «Varias veces cada día».

Los expertos en ciberdelincuencia repiten a diario consejos útiles para no caer en la trampa. Ojo a los enlaces en un mensaje (SMS o WhatsApp, que es a lo que te dirigen con esta estafa tras la llamada) o al acceso a plataformas de pago que parecen reales. La gran recomendación, siempre, es no facilidar datos personales a desconocidos por teléfono. El 'no abra la puerta' de hoy en día. Y también desconfiar de los chollos. Recuerde: por teléfono pueden hacerse pasar por cualquiera. Colgar y bloquear el número (aunque repitan desde otro) es lo mejor que se puede hacer. Y si uno pica, guarde las pruebas y denuncie.