«Sin raíces no somos nada»

Ha llovido a mares en la mañana de este sábado festivo, Día de las Instituciones, con los actos previstos en Puente San Miguel (Reocín) pendientes en todo momento del cielo. El mal tiempo, sin embargo, no ha frenado las ansias reivindicativas de las plataformas que componen la Coordinadora de Cantabria por las Pensiones. Protegidos con paraguas, cantaron sus canciones protesta, compuestas para la ocasión, parapetados detrás de una pancarta y frente al presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que está debajo de un toldo acompañado por su esposa, Aurora Díaz, y su jefe de gabinete, Guillermo Blanco.

Revilla acompañó los estribillos, recogió la carta que le entregaron los portavoces de estos colectivos y, al final, aplaudió también las canciones reivindicativas.

El presidente de Cantabria ha llamado este sábado, en su discurso en el Día de las Instituciones, a reivindicar la historia de la región porque, a su juicio, «si no tenemos raíces y arraigo a nuestra cultura y tradiciones, no somos nada».

Así lo ha dicho en el acto celebrado en la histórica Casa de Juntas de Puente San Miguel en lugar de en el Parque de La Robleda, donde estaba previsto su desarrollo, ya que la lluvia ha impedido su normal celebración.

Debido a la realización del acto en este pequeño espacio, el acto se ha reducido tanto en asistentes como en las intervenciones previstas, siendo el presidente regional el único que ha pronunciado discurso, eliminándose los del delegado del Gobierno en Cantabria, Pablo Zuloaga, y la presidenta del Parlamento, Dolores Gorostiaga.

Por ello, Revilla también ha reducido la duración de su tradicional discurso y ha hecho uno «menos personal» de lo que tenía previsto, pero en el que ha reivindicado la historia de la Comunidad Autónoma, su papel en el conjunto de España y ha dado cuenta de las reclamaciones de Cantabria al Estado, y que trasladará este próximo martes, 31 de julio, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Sobre la historia de Cantabria y estando en el lugar en el que en 1778 se proclamaron las Ordenanzas de Cantabria y se constituyó la Provincia homónima, el presidente ha expresado su «orgullo por esta tierra» y se ha preguntado «qué pensarían aquellos junteros si viesen en lo que nos hemos convertido hoy».

Y es que, ha dicho, «somos una comunidad que, por supuesto, pedimos los nuestro» y al mismo tiempo «pertenecemos orgullosos a España». «Nos sentimos cántabros y españoles», ha ensalzado el presidente, que ha asegurado que Cantabria es «un tierra que reivindica lo suyo pero somos solidarios con el resto del país».

Por ello, ha considerado que la Comunidad Autónoma es «ejemplo de una identidad bien entendida».