Secciones
Servicios
Destacamos
Si se da por bueno el balance de 2024 que hizo la presidenta regional, María José Sáenz de Buruaga, en su mensaje navideño, Cantabria vendría a ser lo más parecido al Paraíso en la Tierra: una Comunidad pujante y en desarrollo que todos quieren visitar y en la que todos quieren invertir, en un año lleno de buenas noticias. Es cierto que algunos argumentos parecen difíciles de rebatir, como el de que Cantabria haya registrado las mejores cifras de empleo de los últimos 18 años, con un récord histórico en la afiliación a la Seguridad Social, con más de 240.000 trabajadores, aunque haya quien discuta a quién corresponde el mérito. También tiene derecho a celebrar el éxito de algunos paisanos durante este curso que ahora termina, y que no depende de su Gobierno. Es el caso de Álvaro Pombo, quien ha llevado a Cantabria a lo más alto de las letras al ser distinguido con el Premio Cervantes, y también el de los deportistas Diego Botín, Cristina Bucsa y los hermanos Álex y Daniel Dujshebaev, medallistas en las pasadas Olimpiadas de París. El reconocimiento de Costa Quebrada como Geoparque de la Unesco y los recientes hallazgos en Altamira, donde se ha descubierto una veintena larga de nuevas representaciones artísticas, son también justificado motivo de satisfacción.
El Diario ha tratado de resumir 2024 en una serie de píldoras informativas, recogiendo tanto sus luces como sus sombras, una labor a la que también ha contribuido una veintena de personalidades de la región, que han condensado en un par de frases lo mejor y lo peor de este año que ahora termina.
La aprobación del segundo presupuesto de Sáenz de Buruaga vuelve a probar la vigencia de la alianza entre PP y PRC, en un ejercicio en que se registró la primera crisis de Gobierno, con la sustitución de los consejeros de Cultura y Deporte y Ganadería, los que más críticas acumulaban por su gestión, tras poco más de un año en el cargo. María Jesús Susinos se convirtió así en la nueva titular de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, en sustitución de Pablo Palencia, a quien se reprochó una débil respuesta ante la llegada a Cantabria de la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), que se cobró numerosas cabezas de ganado.
En el caso de Eva Guillermina Fernández, a quien ha sucedido Luis Martínez Abad al frente de Cultura, Turismo y Deporte, su paso por la Consejería estuvo salpicado por continuas polémicas, dejando la sensación generalizada de que sólo promocionó aquella parte de la cultura que le interesaba: la más elitista y la menos popular. La del palco del Palacio de Festivales y no la de la calle.
En el Parlamento, ha sido noticia la ruptura en el seno de Vox, con la marcha de Cristóbal Palacio al Grupo Mixto, el estallido final de una crisis de largo recorrido en el partido, que tuvo como episodios precedentes la suspensión de militancia del diputado por un periodo de dos años por parte de la dirección nacional, tan solo un mes después de que sancionara a la portavoz parlamentaria, Leticia Díaz, por acoso laboral a una trabajadora. En el PRC, Revilla ha anunciado que éste será su último año como secretario general de los regionalistas.
Como hitos del Ejecutivo podrían destacarse el acuerdo con el Estado para la estación intermodal de La Pasiega y el comienzo de las obras del primer parque eólico, en El Escudo, después de más de diez años.
A nivel municipal, se han registrado mociones de censura en Santillana del Mar, Rionansa y Santa María de Cayón. En Santander, finalmente, hay acuerdo entre el Ministerio y el Ayuntamiento para construir el segundo espigón de La Magdalena, tras cuatro años de paralización de la obra. En Torrelavega, se han iniciado las obras de la vía auxiliar para el soterramiento, y también han dado comienzo los trabajos para construir los aparcamientos disuasorios en altura.
«Lo mejor, que este Gobierno ha generado estabilidad política, diálogo y confianza, lo que ha permitido desplegar una amplia agenda de reformas estructurales». «Lo peor, el sufrimiento de nuestros compatriotas valencianos. Nos hemos sentido golpeados por la terrible riada».
«Lo mejor, la rebaja fiscal, para hacer nuestra región más atractiva y competitiva, y la Ley de Simplificación Administrativa». «Lo peor, el absentismo, que se ha convertido en el principal problema de las empresas, y no tener capacidad para influir en la toma de decisiones».
«Lo mejor, la declaración de la Unesco de Costa Quebrada como Geoparque Mundial». «Lo peor, no haber conseguido durante 2024 que se apruebe el decreto sobre las viviendas y pisos de uso turístico para superar los problemas del sector».
El problema derivado de la falta de profesionales sigue siendo el principal lastre de la Sanidad pública en Cantabria, que en algunos centros, como el Hospital de Laredo, compromete notablemente su actividad. Cantabria terminará el año con menos pacientes en lista de espera, aunque la buena progresión de principio de año sufrió un brusco frenazo en los meses de verano, que se ha intentado compensar en los últimos meses: el último recuento, correspondiente a noviembre, daba un resultado de 17.524 personas en lista quirúrgica. Por otro lado, el Servicio Cántabro de Salud ha afrontado este año un histórico proceso de estabilización, con cerca de 2.500 plazas por cubrir, la mayor parte de ellas a través de la oferta de empleo público de estabilización extraordinaria por concurso, en la que se valoraban los méritos acumulados. Otra nota positiva la constituye el acuerdo para la subida salarial a todas las categorías profesionales, tras el alcanzado inicialmente con los médicos, y el logrado con los SUAP y el 061. En cuanto a los grandes proyectos de legislatura, ya se ha procedido a perimetrar la zona en que se construirá el búnker de la protonterapia, mientras ya ha concluido la fabricación del equipo.
Los juzgados de Cantabria siguieron acusando los efectos de las dos huelgas en la Administración de Justicia del 2023 y, en menor medida, de la paralización que causó hace ya cuatro años la pandemia del covid, si bien el gran caballo de batalla de la Justicia siempre ha sido el retraso a la hora de dar respuesta a la ciudadanía.
Según recoge el último Informe sobre la situación de los órganos judiciales que trimestralmente elabora el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en Cantabria había 40.260 asuntos en trámite a 30 de junio, lo que supone un 12,4% más respecto al año anterior.
El 2024 también dejó dos renovaciones de sendos cargos representativos entre los profesionales de la Justicia. Por un lado, Jesús Arteaga fue nombrado fiscal superior de Cantabria tras ocupar su antecesora, Pilar Jiménez, un puesto en el Consejo General del Poder Judicial. Además, recientemente, Carlos Pérez fue elegido nuevo decano del Colegio de la Abogacía de Cantabria en sustitución de Andrés de Diego.
«Lo mejor, el cambio que va a existir en el Colegio después del último proceso electoral». «Lo peor, que la abogacía sigue sufriendo la incertidumbre de muchos compañeros por sus jubilaciones, y porque muchos abogados del turno de oficio continúan esperando los cambios necesarios».
«Lo mejor, el buen periodismo, que sigue resistiendo, y ¡ay de la sociedad que no lo defienda!». «Lo peor, las noticias falsas, los bulos y las mentiras que buscan desinformar y manipular a losciudadanos».
«Lo mejor, estar en la Diócesis de Santander y descubrir la grandeza de sus gentes y la belleza de esta tierra». «Lo peor, sin duda, las guerras, las injusticias y especialmente el terrible sufrimiento causado por la riada en mi tierra».
La nota más negativa del año, sin duda, es el conflicto abierto con la junta de personal docente por la mejora salarial pendiente de los profesores de Cantabria, una cuestión enquistada. En pocas palabras, el colectivo de docentes reclama una subida salarial de 325 euros desde ahora y hasta 2027, mientras que el Gobierno regional les ha ofrecido negociar las mejoras en 2025 y aplicarlas en 2026, una oferta que en absoluto convence a los afectados, que se han mostrado dispuestos a mantener las protestas, las movilizaciones y las diferentes acciones de reivindicación. En la Universidad de Cantabria, la firma del Contrato Programa permite a la institución tener margen de maniobra para su actividad y proyectos: se trata de una hoja de ruta plurianual –el adjetivo más pretendido por la UC porque ata su financiación para los tres próximos años– y dotada con cerca de 310 millones de euros para todo el periodo, a razón de 100 millones en 2025, 103 en 2026 y 106 en 2027. Más acuerdos: el de 'Pareja docente', en aulas de un año, supone que siempre va a haber un maestro, y otro, la jornada lectiva parcial para profesores mayores de 55, que hará posible que repartan su tiempo en otras tareas dentro de su ámbito de trabajo. También se zanjó el proceso de estabilización en el sector educativo. Este nuevo curso, la Formación Profesional sigue al alza, con más matriculaciones de alumnos. En los centros de educación, 2024 fue el primer curso sin teléfonos móviles.
Aunque ha sido un buen año en cuanto al clima –ya se sabe que 'buen tiempo' no significa lo mismo para turistas playeros, esquiadores o agricultores–, y a pesar de que han mejorado los precios de venta de algunas producciones, se siguen perdiendo explotaciones ganaderas en Cantabria, algo a lo que es preciso poner remedio, como reclaman continuamente los representantes del sector. Otro de los retos pendientes es asegurar el relevo generacional con la incorporación de jóvenes, un objetivo difícil de cumplir mientras la ganadería no pueda ser considerada una actividad lo suficientemente viable desde el punto de vista económico como para atraer a nuevos profesionales. Para la agricultura, los efectos de la borrasca Kirk provocaron importantes daños: la intensa borrasca anegó por completo las plantaciones de patatas de Valderredible, cuando sólo se había recolectado el 10%, y echó abajo la práctica totalidad de las de maíz que los ganaderos usan para dar de comer a las vacas, cuando la recogida rondaba el 50%.
Para el sector pesquero, ha sido un año de luces y sombras: aceptable para la flota de cerco, con una buena costera de la anchoa –aunque la del bonito no haya sido de las mejores–, no así para las otras artes, distintas de cerco y arrastre; en esas otras, mala costera del verdel y del bonito, con unas cifras de las peores de los últimos años. Para ellos, un año complicado.
«Lo mejor, sin duda, la estabilidad que el PRC ha proporcionado a Cantabria, y que hace sólo unos días permitió la aprobación del Presupuesto». «Lo peor, la debilidad del Gobierno del PP y de la presidenta, con una preocupante falta de liderazgo para gestionar los retos estructurales».
«Lo mejor, las buenas sensaciones con que se van todos los turistas que nos visitan, que hacen que cuando se marchan quieran volver». «Lo peor, que la temporada turística haya sido más corta que la de otros años, prácticamente de un mes. El tiempo no ha acompañado».
«Lo mejor, que ha sido un buen año de forraje, y los costes de producción se han atenuado porque no ha costado tanto alimentar al ganado». «Lo peor, que el lobo sigue siendo un problema sangrante, con el aumento de su población y también del número de ataques».
Cantabria incrementa su crecimiento pero pierde posiciones en la media nacional, superada por Galicia: se crece más que antes, pero menos que el resto del país. Al tiempo, se está conteniendo la deuda, a la espera de que el próximo año haya un acuerdo sobre la quita a las comunidades.
Con un PIB de 15.355 millones de euros, la previsión de crecimiento para 2024 era del 2,2%, algo menor del registrado el año anterior, cuando llegó al 2,6%. Con las cifras de 2023, la región ocupa el décimo lugar en cuanto al PIB per cápita, que alcanza los 28.461 euros, un 7,4% más que el año anterior, pero 2.507 euros por debajo de la media nacional.
En el ámbito industrial, la llegada de 30 millones de euros para Solvay para su proceso de transición energética garantiza el futuro a medio plazo de la compañía, que acaba de cambiar de director: Pablo Alonso sustituye a Jorge Oliveira.
Aunque hay avances, otros dos proyectos en la cuenca del Besaya siguen pendientes de desarrollo: la planta de hidrógeno verde en el espacio que ocupaba Sniace, aún sin fecha, y el de litio verde, en terrenos del Solvay, que tuvo que renunciar a las ayudas del Perte por no poder cumplir los plazos, pero que ha conseguido otra subvención europea que mantiene la viabilidad del proyecto.
Las continuas y variadas polémicas en que se vio envuelta Eva Guillermina Fernández provocaron su cese como consejera de Cultura y Turismo –aunque luego fuera recolocada como directora general de Cultura, donde su labor está siendo mucho más discreta–. Desde su marcha, no se ha podido hablar de un rumbo claro en la política cultural del Gobierno regional, ni se ha tenido noticia de nuevos proyectos. La anunciada marcha de Esteban Sanz Vélez, director artístico del Palacio de Festivales, a quien Cultura ha decidido no renovar el contrato, y la dimisión de Gustavo González Monterrubio como director de la Sociedad Regional de Cultura, Educación y Deporte, pueden ser los primeros pasos del proceso de cambio iniciado el pasado mes de septiembre con el nombramiento de Luis Martínez Abad al frente de la Consejería. La construcción del Mupac, que recibirá en 2027 a su primer visitante –si se cumplen las previsiones–, es la gran apuesta del Gobierno, heredada del anterior, para esta legislatura. Otras grandes infraestructuras culturales continúan su avance, como las obras de Faro Santander, y las que se acometen en el edificio que ocupaba el Banco de España para acomodar el Archivo Lafuente-Reina Sofía. Hay que destacar, por otro lado, la concesión del prestigioso Premio Cervantes al santanderino Álvaro Pombo, con una vasta producción entre novelas, relatos, ensayos, libros poéticos y artículos en prensa, como la serie que viene publicando en las páginas de El Diario Montañés. Se suma Pombo a los otros cervantes cántabros, Gerardo Diego, que lo fue en 1979, y José Hierro, en 1998. Las más de 18 obras traducidas a 13 idiomas dan fe de la trascendencia creativa de este cántabro universal. El año se despide, además, con la noticia del descubrimiento de 23 nuevas representaciones artísticas en Altamira, con grabados de animales y otras marcas negras y rojas.
«Lo mejor, que la profesión de enfermera se ha hecho más visible en el cuidado de la salud». «Lo peor, no haber conseguido aún el reconocimiento profesional que nos corresponde comocategoría A1».
«Lo mejor, el compromiso de Pedro Sánchez con Cantabria, con su implicación en la financiación de La Pasiega y las inversiones industriales». «Lo peor, la confrontación permanente de la presidenta Buruaga con el Gobierno de España como excusa para tapar su parálisis».
«Lo más destacable ha sido la capacidad de adaptación de nuestras empresas en un contexto económico que sigue siendo complejo». «Lo peor: la incertidumbre económica, los costes energéticos y las dificultades en la cadena de suministro han afectado a nuestras empresas».
Hacía años que el Racing no despertaba tanto entusiasmo entre la afición, con un arranque de liga en el que ha batido todos los récords, aunque se haya desinflado en las últimas semanas de competición. El conjunto verdiblanco tenía todo a su favor para proclamarse campeón de invierno, salvo que sucediese una catástrofe. Y así se puede considerar el hecho de que únicamente lograra sumar dos puntos de los últimos 18 en juego, lo que ha hecho que terminara la primera vuelta tercero, por detrás del Almería y del Mirandés, tras dilapidar una renta de once puntos por el ascenso directo. En cualquier caso, quizás lo más notable de esta temporada sea el tirón del club entre la hinchada, como prueban los mil abonos vendidos para la segunda vuelta tan sólo unas horas después de abrir las taquillas, y con los que el Racing llega a los 17.000 socios.
El año deportivo tiene otros nombres propios, como los de los cántabros presentes en los Juegos Olímpicos de París, con el oro de Diego Botín en vela en 49er, los bronces de Cristina Bucsa, en dobles de tenis, y de los hermanos Dujshebaev, Álex y Daniel, con el equipo de balonmano, y el quinto puesto de Mohamed Attaoui en la final de 800 metros. También merece una mención el debut europeo del Bathco BM Torrelavega de balonmano.
La región alcanzó su máximo histórico de población el mes de octubre con 593.044 habitantes, en un año en que la diferencia entre las muertes y los nacimientos se resolvió con una pérdida de 2.883 cántabros, pero que, a cambio contó con la llegada de más emigrantes. El récord alcanzado el pasado mes de octubre afianza una tendencia al alza poblacional que no se vivía desde hacía una década.
El crecimiento de la población en Cantabria es, no obstante, ligeramente inferior a la tónica general en España, una peculiaridad derivada de la menor capacidad de captación de extranjeros respecto a otras comunidades con un modelo económico capaz de absorber mucha más mano de obra no cualificada. La falta de industria y el menor peso de la agricultura respecto a otros territorios del interior o del sur hace mucho más complicado acoger a toda esta masa de personas sin formación que buscan una oportunidad para salir adelante y emprender un proyecto de vida.
«Lo mejor, el incremento de la oferta formativa del Colegio Oficial de Médicos, el segundo con más formación acreditada de España». «Lo peor, que se han continuado registrando agresiones a médicos, una lacra social contra la que hay que seguir luchando».
«Lo mejor, que seguimos viviendo en un mundo civilizado». «Lo peor, la crispación política».
«Lo mejor, la puesta en marcha del Centro de Formación Náutico Pesquero Puerto de Laredo, y los nuevos titulados que han obtenido la acreditación de competencia profesional marítimo pesquera». «Lo peor, la costera del verdel de anzuelo, que ha sido muy mala».
Pese a que el año hidrológico cerró con valores normales en la región –se totalizaron 1192,7 mm de precipitación siendo la media climatológica de la serie de 1246,3mm–, la impresión que queda entre buena parte de los cántabros, y también de los visitantes, es que 2024 ha sido húmedo, quizás porque la lluvia cayó cuando no se la esperaba. Es lo que sucedió durante la Semana Santa, afectada en lo turístico por el mal tiempo, y también en la campaña de verano, con poco más de un mes de playa, de mediados de julio a mediados de agosto, que se despidió ya con aire otoñal. De hecho, hasta el arranque de septiembre –el año hidrológico va de octubre a octubre–, Cantabria había registrado un 11% menos de lluvia de lo habitual. Un septiembre muy húmedo hizo posible que las precipitaciones se situaran en volúmenes normales. Si en el invierno de 2023 apenas cayó nieve –con una temporada de esquí de duración mínima–, en éste está por ver qué sucederá. De momento, Alto Campoo, que inauguró la campaña el pasado 12 de diciembre, sigue abierto.
Después de un 2023 excepcional en el que se batió el récord histórico de pasajeros, con 1,2 millones, este año parecía difícil mantener esos números por las diferentes conexiones y los problemas con la ruta a Madrid: mes a mes las cifras no alcanzaban las del año anterior. Aunque se supera el millón de pasajeros, se está lejos de esos máximos de actividad. Para revertir esta tendencia se cuenta, desde noviembre, con el vuelo a Madrid que se ha sumado a primera hora de la mañana un día más a la semana, mientras se avanza en la renovación de los convenios de promoción en algunas rutas: a la convocatoria de Sevilla se ha presentado únicamente Volotea; para los destinos de Ibiza y Menorca, además de Volotea, que ha venido operando estas rutas, hay ofertas de Vueling. Eso, competencia, es el anhelo más importante del Gobierno de Cantabria para la ruta con Madrid: consciente de que la oferta no es buena, el Ejecutivo trata desde hace meses de convencer a alguna compañía para que opere la ruta y complementar así lo que ahora hace Iberia a través de Air Nostrum. El objetivo es mejorar los horarios y también los precios de los billetes.
El mal tiempo ha lastrado los resultados turísticos en Cantabria, con un junio y julio más flojos que otros años y un agosto que ayudó a cuadrar los números. Los datos hoteleros indican que hubo menos viajeros, aunque un ligero aumento de las pernoctaciones entre junio y agosto: vinieron menos, pero se quedaron un poco más. El fenómeno de los pisos turísticos, aún por regular en Cantabria, sigue distorsionando las estadísticas de visitantes.
El Puerto se había marcado el reto de consolidar este año los 7 millones de toneladas transportadas, con el ambicioso objetivo de llegar a las 8 en 2028 y generar una cifra de negocio de 30 millones de euros, mientras esta infraestructura aporta ya cerca del 14% del PIB a la economía regional. El futuro crecimiento del Puerto de Santander sigue pendiente del desarrollo de la zona logística del Llano de la Pasiega.
«Lo mejor, la derogación de la Ley de Memoria Histórica y la solidaridad de los montañeses con los afectados por la gota fría». «Lo peor, las oportunidades perdidas para la prosperidad de los montañeses por el continuismo del Gobierno regional y el aumento de la inseguridad».
«Lo mejor, más allá de los números impresionantes con que hemos comenzado la liga, comprobar que la comunión con el racinguismo va cada día a más». «Lo peor, el vía crucis que hemos padecido para poder tener unos terrenos de juego a la altura de lo que nuestros jugadores y aficionados merecen»..
«Lo mejor, la excelente marcha de todos los trabajos implicados en el proyecto del nuevo Mupac, impulsados eficazmente por la actual Administración». «Lo peor, la destrucción de yacimientos arqueológicos y otros bienes patrimoniales, que pasa, en ocasiones, incluso inadvertida».
El balance del Gobierno habla de Cantabria como la región con menos paro y con las mejores cifras de empleo de los últimos 18 años, superando el récord histórico de afiliación a la Seguridad Social, con más de 240.000 personas trabajando. Es cierto que los datos reflejan una creación sostenida de empleo hasta el último trimestre del año, en que se ha registrado una pérdida de trabajadores, hasta sumar un total de 29.527 desempleados en el arranque de diciembre, un descenso achacable en buena medida a la temporalidad de los puestos que genera el sector turístico.
«Lo mejor, que Cantabria haya aprobado sus Presupuestos, con un matiz: hay necesidad de potenciar la inversión en investigación y desarrollo». «Lo peor, a nivel nacional, la falta de consenso entre los partidos para abordar los retos estructurales que tiene la economía española».
«Lo mejor, la recuperación del turismo extranjero y el aumento del turismo nacional, a pesar del tiempo que ha hecho». «Lo peor, el mal tiempo que nos ha acompañado durante casi toda la temporada».
El primer año de vigencia de la nueva Ley del Suelo del Partido Popular, que flexibiliza la construcción en suelo rústico, se ha traducido en un mayor número de obras, aunque no puede considerarse que se haya registrado un aluvión de peticiones. Según los representantes del sector, la actividad se centra en las segundas residencias en las zonas costeras, sobre todo, y primeras viviendas en núcleos como Santander, pero en zonas para un nivel medio-alto de ingresos. Achacan a la falta de suelo –con cerca de 80 ayuntamientos a falta de nuevo Plan General–, la lentitud burocrática y el elevado coste de los materiales la dilación en la recuperación de la construcción.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Rocío Mendoza | Madrid, Lidia Carvajal y Álex Sánchez
Álvaro Machín | Santander
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.