Revilla augura un verano «extraordinario, mejor aún que el del año pasado»

Además, según Revilla, este verano será «más seguro» porque se llegará a junio con una tasa de población vacunada mayor de 18 años del 60%.

A preguntas de la prensa con motivo de la asistencia del presidente a los actos en homenaje a la Virgen del Mar, patrona de Santander, Revilla manifestó que «las cosas se han hecho bien en Cantabria, siguiendo las normas y protocolos de todos los países desarrollados».

La prueba, subrayó, es el dato de incidencia, «mucho menor que en el resto de España» sobre todo en lo que se refiere a muertes, ya que Cantabria es «la que menos ha tenido» junto a Baleares y Canarias.

Además, «nunca ha ocurrido», como en otros lugares del país, que algunas personas no hayan podido recibir asistencia hospitalaria por falta de espacio o de camas de UCI, lo que «ha salvado muchas vidas». Igualmente, la presión hospitalaria es «muy baja», el ritmo de vacunación «va muy bien» y la incidencia acumulada está ahora «muy por debajo de la media» española a pesar de que hace unos meses Cantabria tuvo la segunda peor del país.

Estos datos positivos son consecuencia, a juicio de Revilla, de que Cantabria ha seguido la recomendación mundial de que sea Sanidad quien marque las pautas de actuación. «Los políticos tenemos que acatar las decisiones que toman los que más saben», remarcó.

Y preguntado sobre las decisiones del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) que han dado la razón a los hosteleros y han echado abajo las limitaciones horarias de apertura de los establecimientos, el jefe del Ejecutivo cántabro respondió que «era algo esperado» y recordó que al terminar el estado de alarma ya pidió que se creara una doctrina unificada por el Tribunal Supremo para no tener estos «desencuentros judiciales» en las diferentes comunidades, ya que unos tribunales avalan las medidas restrictivas y otros no.

De todos modos, «lo que tenemos que hacer en un Estado de derecho es acatar las resoluciones judiciales», opinó, destacando que existen tres poderes –ejecutivo, legislativo y judicial– y que los jueces «tienen la última palabra».

Así, tras terminar el estado de alarma «se va a ir volviendo a la normalidad de manera progresiva» y la situación ahora «depende de nosotros» al no poder implantar ciertas medidas.

«No podemos olvidar que el virus está circulando entre nosotros», ha advertido Revilla, señalando que hasta que no se alcance el 60% de población vacunada «vamos a tener problemas».