Revilla sopesa rebajar los impuestos a las rentas inferiores a 35.000 euros

Por cuarta semana consecutiva, PRC y PSOE tuvieron que defender su posición al respecto frente a PP, Ciudadanos y Vox, que, un lunes más, abordaron al Ejecutivo regional con todo el arsenal a su alcance.

Vox, con una proposición no de ley pidiendo al Parlamento que inste al Gobierno de Cantabria a bonificar al 99% el Impuesto de Patrimonio, rebajar la escala autonómica del IRPF en un punto porcentual en cada uno de los tramos; Ciudadanos con una interpelación al Gobierno cuestionándose qué criterios y motivos contempla para manejar la posibilidad de modificar de una manera contundente su política fiscal; y el PP con una pregunta formulada directamente al presidente: ¿cuál es su postura en relación a la bajada de impuestos?

Considerando los precedentes –ni una sola de las propuestas que la oposición ha presentado en lo tocante a las medidas fiscales ha sido tenida en cuenta–, no podía extrañar que las dos primeras naufragaran, como así fue, y que todo el interés de la sesión se concentrase casi única y exclusivamente en la respuesta que debía dar Miguel Ángel Revilla, que en su intervención insinuó que el Gobierno de Cantabria va a poner encima de la mesa una rebaja fiscal para las rentas inferiores a 35.000 euros.

Esto, después de oír a la pre-sidenta del PP llamarle veleta. «Por la mañana, un centralista a tope y elevador de impuestos»; y «por la tarde, un populista sopesando la supresión del Impuesto de Patrimonio», le recriminó María José Sáenz de Buruaga, que acusó al presidente de moverse «según sople Sánchez desde la Moncloa».

Según la jefa de la oposición, «los cántabros no están para confusiones ni para incoherencias. Reclaman soluciones, y necesitan que les bajen los impuestos», algo que, afirmó, Revilla no contempla en este momento porque «está entregado a la política fiscal de la izquierda».

«Pagar impuestos para que el Gobierno regional haga hucha mientras los ciudadanos no llegan a fin de mes no tiene un pase, aseguró Sáenz de Buruaga, que acabó con un ruego y un ofrecimiento personal al presidente. «Abandone ya su entreguismo. Deflacte la tarifa del IRPF y baje los impuestos a los cántabros para poder ganar en competitividad. Le ofrezco los votos del PP ya mismo para que lo haga».

Todo oídos, la presidenta popular cedió el atril al líder regionalista, que en su respuesta justificó los cambios de criterio del Gobierno de Cantabria en sus políticas fiscales.

«Dice que somos unos veletas. ¡Como para no ser unos veletas! ¡Con la que está cayendo!», indicó el presidente, que acusó al PP de tener la suya siempre en el mismo sitio. «Nosotros, a diferencia de ustedes, la movemos». Y ahí es que lanzó la novedad. «Y ahora mismo estamos estudiando medidas, y vamos a tomar alguna que beneficie a aquellos cántabros que menos tienen. Porque estamos hablando de las rentas de menos de 60.000 euros, o sea, de nosotros mismos, que podemos sobrellevar mejor esta situación, pero los que ganan menos de 35.000 lo están pasando mucho peor».

Con esto, el presidente vino a decir que el Gobierno regional está estudiando actualmente la posibilidad de aplicar una rebaja fiscal en el IRPF a las rentas inferiores a esa cantidad, una medida que, al menos de momento, no va a venir acompañada de la supresión, «ni total ni parcial», del Impuesto de Patrimonio.

Al menos eso había dejado claro en su intervención previa la consejera de Economía, Ana Belén Álvarez, que en respuesta a las iniciativas de la oposición pidiendo la retirada de un impuesto «anacrónico», apuntó que la supresión de ese impuesto no beneficia a las clases trabajadoras. «El año pasado, ese impuesto gravó a menos de 3.000 contribuyentes, el 0,5% de la población, con una media de 5.500 euros», recordó Álvarez, más partidaria de que «los que tenemos más arrimemos el hombro».

PRC y PSOE echaron este lunes abajo una moción del PP en la que pedía al Parlamento regional que inste a la Consejería de Empleo y Políticas Sociales a impulsar las iniciativas propuestas por las plataformas integradas en la coordinadora 'Fuera Okupas Cantabria', entre las que figuran la elaboración de un mapa de la ocupación ilegal en Cantabria, la creación del Observatorio de la Okupación en Cantabria o la apertura de una oficina de información, asesoramiento y apoyo a los propietarios e integrantes de las comunidades de propietarios afectados por la ocupación ilegal de viviendas en la región.

El Parlamento de Cantabria aprobó este lunes una iniciativa presentada por el Grupo Popular en la que pedía instar al Gobierno de España a implementar «de forma urgente» medidas para minimizar el impacto del incremento exponencial de los costes energéticos en las empresas de la comunidad. La moción, que el PP presentó con el respaldo de Ciudadanos y la diputada no adscrita Marta García, también contó con el apoyo de los regionalistas, pero no así de los socialistas, que, en su caso, decidieron abstenerse rompiendo de nuevo la unidad del voto que practica con su socio en el Ejecutivo regional.