«Revilla vendió su alma a Pedro Sánchez y lo va a pagar caro. Cuando caiga Sánchez, caerá Revilla»

-El PRC les acusa de torpedear el acuerdo de la Ley del Suelo. De votar 'no' por tacticismo.

-La intención de la negociación y el 'no' final no era hacer una fractura en el Gobierno, sino hacer la mejor ley posible, que no es aquella que implica un paso atrás en el régimen de construcción de vivienda unifamiliar en suelo rústico. En 2012 se produjo un cambio para permitir estas viviendas en muy determinadas condiciones con el apoyo del PRC y no nos parece lógico que ahora supriman esa posibilidad que ha funcionado muy bien estos diez años. Nosotros hemos defendido lo que nos dicen nuestros alcaldes, pero también lo que dicen los alcaldes regionalistas. Ofrecimos a Revilla llegar a acuerdos, pero él quería sacar la ley con el PSOE.

-Más allá de lo que ocurrió con la Ley del Suelo, ¿el PP ha trabajado con la hipótesis de que se rompiera el pacto y de que el PRC requiriera de su apoyo?

-Nosotros no hemos planteado esa estrategia, pero sí hemos hecho ver a los cántabros que los acuerdos entre Revilla y Sánchez no han sido beneficiosos para Cantabria. Acaso sí para Revilla. Sin embargo, con el tiempo, se dará cuenta de que le serán perjudiciales. Revilla vendió su alma a Pedro Sánchez y eso lo va a pagar. En su caída, Pedro Sánchez va a arrastrar a Revilla.

-La crítica que hace Feijóo a Sánchez es la misma que la que hace Buruaga a Revilla, que se encuentra fuera de la realidad.

-La percepción de la sociedad es que Sánchez está en una espiral de supervivencia personal. Con Revilla el proceso es distinto, aunque el resultado es el mismo. Está fuera de la realidad porque no ha entendido el nuevo escenario en el que vivimos tras el covid. Como no lo ha entendido, no lo puede gestionar. La sociedad cántabra tiene la idea de que el tiempo de Revilla ha pasado.

-Entonces, ¿las carencias del bipartito son más responsabilidad del presidente que de los partidos que lo integran?

-El acuerdo PRC-PSOE no funciona -esta legislatura peor que nunca en su dinámica interna y en la gestión-, pero es que además el líder está agotado. Revilla no es consciente de lo que está sucediendo en Cantabria y no maneja en ningún modo soluciones para los problemas. Hay un fin de ciclo en ambas cosas: el bipartito y el presidente.

-Un dato del que presume Revilla: el PP dejó el paro en el 18,5% y hoy está en el 10,5%, por debajo de la media nacional.

-Esa comparación es absolutamente tramposa. El PP, cuando llegó al Gobierno de España en 2011, encontró seis millones de parados. Con Zapatero, solo en 2009, fueron al paro 1,2 millones de españoles.

-Piden bajar impuestos. ¿Qué impuestos y en detrimento de qué políticas públicas?

-La crisis de 2008 fue una crisis de deuda, y Zapatero echó gasolina al fuego endeudando más al país. Ahora es una crisis de la inflación, y las respuestas de España y Cantabria son más gasto público y más impuestos. Vuelven a echar más gasolina al fuego. Se necesita controlar el gasto, no expandirlo. Controlar la gestión de los impuestos, no subirlos o generar nuevos. Incentivar la actividad económica, no lastrarla para luego inventarse subsidios. Se dice que la inflación es por la guerra de Ucrania. No es verdad, viene desde el verano pasado, aunque la ha agravado. Es que en Francia la inflación es la mitad que en España. Zapatero fue el peor presidente de España y Sánchez le va a hacer bueno.

-Si el PP gobierna, ¿dará becas a estudiantes de familias que cobren más de 100.000 euros, como plantea Díaz Ayuso?

-No lo sé. No conozco ese tema tan al detalle. No sé cuál será nuestra política de becas cuando lleguemos al Gobierno.

-¿Entendería que hubiera una candidatura alternativa a la de María José Sáenz de Buruaga en el Congreso del PP?

-A un congreso de un partido se pueden presentar todos los que quieran si tienen respaldos. Yo lo que creo es que nuestro congreso se va a resolver con una única candidatura. Creo que es lo que va a pasar y que es lo mejor para el partido, pero eso no implica privar a nadie del derecho a presentarse. Eso sí, quien quiera presentarse debe saber que los apoyos los tiene que tener dentro del PP de Cantabria, no puede ir a buscarlos a Murcia.

-¿Por qué el equipo que perdió las elecciones en 2019 es el mejor para ganarlas en 2023?

-Perdimos las elecciones, pero yo creo que no fue un mal resultado. Veníamos de haber obtenido un mes antes, en las generales, el peor resultado de la historia del PP. En España bajamos de 137 a 66 diputados y en Cantabria, de 13 a 9. Si aplicáramos la misma proporción que a nivel nacional, tendríamos que haber obtenido seis. Nueve diputados y mantener casi cuarenta alcaldías, entre ellas Santander, es un resultado digno. Hoy, las perspectivas del PP han mejorado espectacularmente. Creo que ganaremos las autonómicas.

-¿Ve lógico que Gema Igual tenga un asiento en el Parlamento?

-Las listas hay que hacerlas con una visión de conjunto. Ver si entran alcaldes en general o no. Ver qué perfiles son los más idóneos. Las listas no se hacen en función de las peticiones. Si Gema tiene ese deseo, se estudiará, pero hay que atender el criterio de implantación territorial, de tener perfiles conocedores de distintos temas... Los diputados, a ser posible, no deben tener otra ocupación principal que no sea la del Parlamento.

-Según ese último criterio, Igual tendría la puerta cerrada.

-No. Hay que tener en cuenta muchos criterios, pero ese último creo que sí que es muy importante. Y es importante tener diputados especializados en áreas como hemos tenido esta legislatura a César Pascual en sanidad o a Pedro Gómez en ganadería.