Su rincón favorito de 'la tierruca'

El actor cántabro elige los Picos de Europa y la playa de Pechón, en la zona occidental de la región, como lugar a recomendar: «Una temprana ruta de alta montaña desde Fuente Dé y el mirador del teleférico, las hay de todos los niveles y para casi todas las edades. Además del ejercicio, el contacto con la naturaleza y la magnificencia del paisaje es beneficioso para el alma. Como dijo Unamuno, 'la montaña nos da todo lo que tenemos; nos pone en nuestro sitio; nos dice quiénes somos'». El actor, que pasa habitualmente parte de sus vacaciones en Santander, la ciudad donde nació, «remataría la ruta de montaña con un tardío y balsámico baño en la playa de Pechón».

La cantante que se crió en Santader se escapa a esta región siempre que puede para «recuperar energía». Ella ha dicho muchas veces que Cantabria y sus playas inspiran su tarea a la hora de escribir muchas de sus canciones. Si tiene que elegir un sitio en concreto, lo encuentra en la bahía de Santander. «Es la más bonita del mundo. La misma que me ha visto crecer desde los primeros 'coles' con mi padre en La Magdalena. Me encanta navegar por ella. Incluso hemos grabado un videoclip en sus aguas, el de 'Patas de Alambre'». La artista, que nació en Londres, asegura en este sentido que uno de los grandes placeres de la vida es, precisamente, «navegar en sus aguas en calma y llegar hasta el faro de la isla de Mouro».

«Este lugar era nuestra playa cuando éramos niñas. La más cercana a Colindres, nuestro pueblo. Aquí veníamos con nuestros padres, sobre todo los fines de semana, extendíamos la toalla y nos quedábamos de comida todo el día», recuerdan las diseñadoras de la firma de ropa Anabel Lee. «Nuestro padre daba paseos y mi madre pescaba almejas (estaba permitido), mientras jugábamos en la arena y nos dábamos un baño. La puesta de sol es espectacular, teniendo como marco incomparable las marismas y las montañas de fondo». «Hemos redescubierto el lugar al ir a hacer alguna sesión de fotos para nuestra marca y se lo enseñamos a amigos que vienen de fuera y no pueden evitar enamorarse también de este paraíso».

El jugador de fútbol cántabro Sergio Canales vive fuera de Cantabria por motivos laborales, pero siempre que vuelve disfruta de las playas de El Sardinero, donde tanto pasó en su niñez y adolescencia. «Por suerte, en Cantabria hay muchos sitios para sentirte de vacaciones y desconectar, pero, si tengo que elegir uno, me quedo con las playas de El Sardinero, que son las que más me gustan», dice Canales. Cada vez que pone un pie en ellas, vuelve «a recordar la infancia en estas playas, jugando con los amigos desde muy pequeño en el muro del Hotel Chiqui y las tardes en el parque de Mesones». El futbolista del Betis explica que lo disfruta menos de lo que le gustaría: «Desde los 18 años solo puedo venir el mes de vacaciones, que lo paso en Santander».

El actor nacido en Torrelavega siempre vuelve a su tierra de vacaciones buscando desconectar del ajetreo de Madrid, del asfalto y de los agobios que no existen en el Parque Natural de Oyambre, su lugar favorito de Cantabria y donde el artista cántabro tiene su segunda residencia. «La playa que más me gusta de Cantabria es la de Oyambre. En concreto, la zona del Pájaro Amarillo, en recuerdo de una hazaña histórica cuando aterrizó allí de emergencia una avioneta de ese color en 1929». Resines recomienda pasear por su kilométrica extensión de arena y disfrutar de la tranquilidad que se respira en la zona. «Es una vista de la que no me canso nunca. Al ser un parque natural está poco construido y el paisaje sigue siendo increíble».

El surfista cántabro reside en la zona de Somo y Loredo, donde se inició en un deporte que le ha dado grandes éxitos. Y si tiene que recomendar un sitio de la región para visitar es, «sin duda», un lugar y –en concreto– un atardecer de esta misma zona. «Si vienes a Cantabria, sin duda debes venir al municipio de Ribamontán al Mar, surfear en las playas de Somo y Loredo y acabar el día para ver el atardecer desde el mirador de Santa Marina o desde una de las playas de Los Tranquilos. Es para mí un lugar mágico que no olvidarás», asegura el surfista, que, por su carrera deportiva, ha viajado a lo largo de medio mundo en destinos paradisíacos. A pesar de todo, considera que estas playas de la región y la ola que en ella se forma son de lo mejor que ha conocido.

La periodista cántabra de Televisión Española lleva tanto tiempo lejos de casa que, «tocar cualquier esquinita de tierra cántabra» le provoca «un escalofrío». «Adoro volver a lo que para mí sigue siendo casa y, obviamente, mi toma de tierra está donde está mi familia, que es Torrelavega». Dentro de la amplitud de lugares especiales de Cantabria, destaca uno: «Si tengo que elegir un lugar especial, al que acudir para sanar, elijo siempre el mar. Y, en concreto, Suances. Me encantaría llevarme en un bote las vistas desde Roca Blanca cuando cae el sol en una tarde de final de verano. Son calma, son el antídoto para cualquier momento de estrés y a lo que me agarro siempre que siento que me rodea asfalto de más. ¡Qué suerte tener ese tesoro tan cerca!».

A la hora de recomendar el lugar más especial, la actriz Ruth Díaz se retrotrae a su infancia, al huerto que sus abuelos Mercedes y Ángel tenían en Vargas. A las largas tardes de verano con sus hermanas y primos. «Mi lugar sagrado», dice. De aquellos días recuerda «el cubo, palos y pasteles de barro. Jugar a 'V' entre los tomateros, a detectives, a espías, al escondite… Bajar a por moras. Los domingos de golosinas y bolsas de Matutano. Las albarcas de mi abuela, el gallinero, las gallinas y las piedras, los tres pollitos de la feria». Después llegó el momento de hacerse mayor y la muerte de sus abuelos, pero entonces llegaron los hijos. De ella, de sus hermanas y primos. «Juegan por donde antes estaba la huerta y los tomateros y vuelven las risas».

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