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Imponente, con una eslora de 215,5 metros, trece cubiertas y capacidad para un millar de pasajeros, el buque Santoña de la compañía Brittany Ferries, atracó este miércoles en el puerto de Santander, en las proximidades del Centro Botín, a las ocho de la tarde, ... donde permanecerá hasta las siete de la mañana del viernes, momento en el que se dirigirá a los astilleros de Astander para su remate y puesta a punto final.
Con su llegada a la capital cántabra, el Santoña pone fin a una travesía de un mes desde el astillero CMJL (China Merchants Jinling Shipyard) de Weihai, en China, donde fue construido. La ruta ha pasado por Singapur, Colombo, Suez, La Valeta, Cartagena y, finalmente, Santander.
Con anterioridad, el buque hizo escala en el puerto de Bilbao, a las seis de la mañana, para hacer el 'bunkering', el proceso para repostar combustible GNL en alta mar (gas natural licuado). Por el momento, la carga de GNL se realiza en el puerto de la comunidad vecina hasta que Santander cuente con estación propia, que está en fase de construcción con la previsión de entrar en funcionamiento este mismo año.
Será el 1 de marzo cuando el Santoña se ponga en marcha. «Para nosotros, es un gran orgullo que sea el primer buque de la flota que lleva un nombre cántabro. Sin duda, es un hito en la historia de Brittany Ferries en Santander. Además, celebramos que el 32% de nuestros pasajeros de 2022 se quedaron disfrutando de Santander y de Cantabria», apunta Roberto Castilla, director de la naviera francesa en España.
Los trabajos de acabado en Astander consistirán, por un lado, en recubrir el casco con una fina capa de silicona que ayudará al barco a llevar una navegación más suave. También se realizarán los últimos retoques del ferri-crucero en cuanto a diseño y decoración. La previsión es que tras veinte días en los astilleros, el buque esté listo para ser inaugurado en marzo y comenzar a operar la ruta Santander-Portsmouth, manteniendo el horario actual: miércoles y domingos, con llegada a las 08.00 horas a la capital cántabra y salida a las 14.00 horas.
El Santoña tiene un calado de 6,6 metros, 27,7 metros de ancho, pesa 40.500 toneladas, alcanza una velocidad de 23 nudos, cuenta con una tripulación a bordo de 85 miembros y una capacidad para vehículos de 2,7 kilómetros en línea. Tras el Galicia y Salamanca, este será el primer buque RO-PAX de Britanny Ferries propulsado por GNL operando en Santander. Estos tres barcos son idénticos físicamente en cuanto a interior y exterior, pero el Galicia no funciona con GNL, aunque la compañía ha resaltado que «es más eficiente» que cualquiera de los barcos anteriores «gracias a su diseño». Los tres son buques tipo E-Flexer.
Personal de Brittany Ferries ya ha viajado a bordo del Santoña para familiarizarse con el buque y llevar a cabo una amplia formación antes de recibir a los pasajeros. Además, a este equipo se sumarán 48 miembros más que se van a seleccionar en la ciudad a lo largo de febrero, según anunció la compañía esta semana.
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