Semana de atascos y esperas en Urgencias de Valdecilla, con picos de 500 casos al día

«Esperemos que cuando acabe el curso escolar empiece a descender la patología respiratoria (laringitis, asma...) en los niños», confía la jefa de Pediatría, María Jesús Cabero, «porque aún no ha bajado la presión asistencial», que siempre es más alta en los meses de invierno. Pero este año no ha llegado aún la tregua. «Nuestros pediatras están haciendo un esfuerzo grande, sin margen para recuperar del cansancio pospandemia. Estamos con una media de 100-110 urgencias diarias y la hospitalización llena. Viendo también muchos niños con virus gastrointestinales, como el rotavirus, que por lo general generan estancias cortas, pero que precisan ingreso para rehidratación», añade la pediatra.

Y las demoras, sobre todo cuando la demanda aprieta, van en función del nivel de gravedad que marque la consulta de triaje: más ágiles los clasificados del 1 al 3 («Los dos primeros pasan directamente», subraya el coordinador de Urgencias, Gonzalo Pérez Rojí), y con más tiempo por delante en las salas de espera los del 4 y 5 -hora y media en el caso de urgencias pediátricas y más de tres si coincide con el momento embudo en el área de adultos-. Y más de la mitad de las personas que recurren a Urgencias se enmarca en ese segundo grupo.

«No podemos atribuir el aumento de la afluencia a un motivo único, hay de todo, especialmente pacientes mayores pluripatológicos», añade Pérez Rojí, lo que se refleja en que «los ingresos están muy repartidos entre distintos servicios, como Medicina Interna, Neumología o Neurología». En la problemática de esta semana, que desde el hospital dan por hecho que se extenderá al resto de junio - «Va a ser un mes complicado», admite el gerente, Rafael Tejido-, ha influido también en ciertos momentos la escasa disponibilidad de camas, que paraliza la rotación de pacientes en los boxes y aumenta los pendientes de subir a planta. El alivio se espera cuando se active el plan de verano a nivel quirúrgico y desciendan las operaciones programadas: eso será en julio. Para entonces, el hospital estará funcionando en 'modo verano' -también con menos camas- para compaginar las vacaciones de sus profesionales.

Desde los servicios de Urgencias apuntan también que «la gente de los núcleos urbanos acude más al hospital que las personas que viven más alejadas. Y estos últimos cuando van a Urgencias suele ser por un motivo más importante», explica Cabero. «También se nota quiénes pertenecen a un cupo de pacientes con un médico de Atención Primaria estable, ya que al estar más controlados, no necesitan ir a Urgencias con tanta frecuencia, y quiénes han perdido esa continuidad asistencial».