El Servicio Cántabro de Salud se quedará sin informáticos de guardia por «un cambio impuesto por Sanidad»

¿En qué se traduce? En que los informáticos que rotan habitualmente para responder a las incidencias que surjan por la tarde, durante la noche o los fines de semana y festivos –un ejemplo reciente ha sido la caída de la centralita del 061 un domingo, fuera de servicio durante horas hasta que se reparó la avería–, a estas alturas de mes ya está llegando al máximo permitido.

Aunque estén dispuestos a cubrir más guardias (a un precio medio de 7 euros la hora, «la mitad que la del personal sanitario»), no pueden por esa medida que ellos mismos consideran «una discriminación y un agravio comparativo con el resto de categorías profesionales, para las cuales no se impone ninguna limitación». Según ha podido saber este periódico, este cambio afecta a los servicios de informática de Sierrallana –donde esta misma semana ya notarán el vacío de personal–, en la red de centros de salud, SUAP y 061 a partir de la próxima semana, y en Valdecilla y el Hospital de Laredo, antes de que acabe el mes de marzo. Pero además de la restricción de guardias, el colectivo denuncia que desde las Gerencias se ha comunicado que «de forma obligatoria» todo el personal del servicio de Informática deber realizar guardia localizada, «sin atender a circunstancias personales de ningún tipo», algo que «nunca ha sido así», dado que «desde hace más de 25 años ha sido un trabajo realizado de forma voluntaria».

Con esta modificación, se daría la paradoja de que tendrían que estar operativos los profesionales que hasta ahora no participaban de las guardias por decisión personal, mientras mermaría la actividad extra de los interesados en hacerlas. Y aún así, exponen los afectados, «dado que la Administración no puede cubrir el tiempo necesario de guardias», se apunta a la posibilidad de «contratar personal únicamente con este objetivo», lo que generaría incluso «un gasto injustificado». Aunque aseguran que se había advertido al director general de Transformación Digital, Santiago García, de las consecuencias de esta limitación salarial, no ha sido hasta hoy –ya con el problema a las puertas– que en la Consejería se ha convocado una reunión de urgencia para buscar soluciones antes de dejar en cuadro los servicios y que no haya nadie al otro lado del teléfono en caso de fallo informático en los centros de salud y hospitales.