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Jueves, 26 de octubre 2017, 11:31
El consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, se ha felicitado por el descenso del paro del 9,9% que revela la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre respecto al anterior, un dato con el que Cantabria se va «aproximando cada ... vez más» a los niveles del año 2010, al inicio de la crisis.
Sota ha considerado que el periodo julio-septiembre ha sido un «buen» tercer trimestre, aunque ha reconocido que el empleo que se crea «no es de buena calidad» y es aún «bastante temporal».
Según ha señalado, se trata de un «defecto» común al resto de comunidades autónomas y que, a su juicio, tiene «mucho que ver» la reforma laboral de 2012.
Respecto al dato interanual, que solo refleja una bajada del paro de 100 personas (-0,18%), Sota ha llamado la atención sobre la «disparidad» del dato de la EPA, que según ha recordado es una encuesta, con el «real» de la Seguridad Social.
El consejero ha sido cuestionado por el efecto que ha tenido en estos datos las contrataciones de la Orden de Corporaciones Locales y ha afirmado que ha sido «neutra».
Más pesimista se ha mostrado la secretaria de Empleo de CCOO de Cantabria, Laura Lombilla, que ha afirmado que los datos publicados hoy en la Encuesta de Población Activa (EPA) confirman la «continua pérdida» de empleo en la región.
Ha lamentado que el tercer trimestre del año, «que a priori tendría que haber sido bueno para Cantabria», continúa en la senda de la pérdida de empleo, con solo 100 parados menos respecto al año anterior, mientras se ha producido un «preocupante descenso» de los ocupados.
En este sentido, CCOO ha indicado que la comparativa de datos no debe realizarse respecto al trimestre anterior, pues los meses de verano son «de generación de empleo, de carácter temporal y precario», lo que siempre produce una «aparente» mejora en las estadísticas.
En la comparativa de los datos en términos interanuales, Cantabria se sitúa «a la cabeza de los resultados más negativos» pues es la comunidad autónoma que mayor descenso registra sobre los ocupados, con 3.500 trabajadores menos; al igual que sucede con la población activa, que desciende en 3.600 personas.
Lo mismo ha planteado el secretario de Empleo de UGT en Cantabria, Julio Ibáñez, pues Cantabria es la autonomía española «con mayor pérdida de ocupados» en el último año (-3.500), «tras solo incrementarse el temporal en el trimestre veraniego».
«Tenemos la mayor tasa de temporalidad en el empleo de los últimos ocho años (25,75%) y el mercado laboral de Cantabria sigue estancado tanto en la cantidad como en la calidad de ese empleo porque, de hecho, somos una de las cuatro autonomías españolas con menos ocupados que hace un año (junto con Castilla y León, Extremadura y País Vasco) y la que más descenso de empleo registra, un 1,42%», ha agregado.
Más combativo, el sindicato USO considera que los datos reflejan que la región «se descuelga de España» en cuanto a creación de empleo, por lo que exige ceses en el equipo económico del Gobierno.
«La EPA nos da de bruces con la realidad de Cantabria. Ni la época estival histórica vivida ha servido más que para maquillar una economía que languidece, se estanca y se precariza de manera alarmante», ha advertido la responsable de USO, Mercedes Martínez.
Martínez ha señalado en un comunicado que «baja el empleo a tiempo completo, aumenta el contrato parcial un 27 %, aumenta la tasa de paro, aumenta el paro juvenil y masculino», pero ha destacado que en España «el camino andado en el último año es en dirección contraria, es decir, de recuperación». Por ello, ha dicho que la EPA «debe de tener consecuencias inmediatas» y se deben producir ceses en los responsables económicos del Gobierno cántabro. «No se puede seguir dos años más con las mismas personas que son incapaces de corregir un rumbo», ha considerado.
Los empresarios cántabros tampoco se muestran optimistas con los datos de la EPA. Son cifras que evidencian, a juicio de CEOE-CEPYME Cantabria, que «las contrataciones temporales de los ayuntamientos pagadas con dinero público y los buenos datos del turismo maquillan periódicamente la realidad del empleo en la región».
Un análisis de los datos evidencia sin embargo que «en Cantabria solo trabajan hoy 100 personas más que hace un año» lo que implica que «los vaivenes mensuales de los datos de empleo nos dejan exactamente en el mismo lugar en el que estamos».
El Presidente de CEOE-CEPYME, Lorenzo Vidal de la Peña, ha valorado el momento como «idóneo para abordar seriamente las medidas necesarias para provocar un cambio de tendencia» y ha explicado que «Cantabria se prepara para contar con unos Presupuestos para 2018 que pueden ser el documento que impulse el cambio y a la vez se enfrenta al reto que supone la nueva financiación Autonómica».
Vidal de la Peña ha explicado también que «desde CEOE-CEPYME somos muy conscientes del riesgo que supone la pérdida continuada de población activa, que puede dejar a la Comunidad sin sus jóvenes y sin futuro, lo que nos convertiría en unas pocas décadas en un Benidorm». Por ello, ha añadido, «el empresariado se va a poner el primero de la fila a la hora de apoyar decisiones y proyectos que sirvan para arraigar a la gente aquí, proyectos capaces de generar algo más que ilusión, eso sí».
Para la presidenta del Partido Popular de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, Cantabria «no conseguirá crecer» al mismo ritmo que lo está haciendo el resto del país «sin más empresarios y más empresas».
Por ello ha señalado la necesidad del que el Gobierno regional realice «una labor de impulso y ponga en marcha una verdadera política industrial», porque ahora es «inexistente», y ha añadido que se necesita «un marco político, jurídico y económico de estabilidad y seguridad, y un clima que favorezca la inversión».
Buruaga ha destacado que «la industria constituye un activo fundamental y diferenciador» de Cantabria, ya que representa «el 20% de la riqueza regional y emplea, en este momento, a 35.100 personas según los últimos datos de la EPA», generando un «importante efecto arrastre y empleo indirecto en el sector servicios».
Sin embargo, ha apuntado que Cantabria crece por debajo y crea menos empleo que la media del país y que por ello estamos en una de las regiones que «en 2018 no habrá recuperado el nivel de crecimiento previo a la crisis».
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