Los subalternos de Educación reanudan sus protestas en defensa de mejoras laborales

De esta manera, la plataforma que defiende los intereses de los conserjes de institutos, escuelas de Idiomas, conservatorios de Música y Centros de Profesores, entre otros organismos, vuelve a retomar de esta manera las protestas con el objetivo de mejorar sus condiciones laborales que iniciaron en la recta final de la pasada legislatura, con Francisco Fernández Mañanes al frente de la Administración educativa.

Los subalternos de Educación critican que apenas perciben 900 euros netos al mes, cuantía equivalente al actual salario mínimo interprofesional y denuncian de que son «el único» grupo de subalternos del Gobierno de Cantabria que no percibe ni un solo complemento no estructural de los recogidos en el Convenio del Personal Laboral. «Nuestro sueldo está 300 euros por debajo de la media del resto», manifiestan.

La plataforma recuerda cómo a lo largo de esta año ha solicitado el reconocimiento de dedicación especial, la denominada jornada prolongada, para todos los conserjes, lo que supondría 223 euros más al mes. Reivindicación ante la que se encontró la «cerrazón» de las consejerías de Educación y de Presidencia del anterior Ejecutivo, lo que les llevó a realizar distintas movilizaciones la pasada primavera, incluida una huelga que tuvo un seguimiento cercano al 90%. El pasado mayo, justo antes de las elecciones autonómicas y municipales, el Gobierno rechazó abonarles el complemento de jornada prolongada amparándose en unos supuestos informes técnicos que indicaban que ese aumento conllevaría superar el tope de la masa salarial. «Creemos que todo fue un gran engaño», señalan. Y ponen como ejemplo el aumento de la estructura de altos cargos, que suponen un encarecimiento de medio millón de euros, sin que haya habido «ningún impedimento legal».

Con la nueva estructura del Gobierno, del mismo signo que el anterior (PRC-PSOE), pero con nuevos responsables en las carteras implicadas en el asunto, no ha cambiado su suerte. En agosto, los conserjes trasladaron a Lombó su reivindicación de cara a que se incluya en los presupuestos de 2020 la partida para abonar ese complemento solicitado. Más de un mes después, no han obtenido aún respuesta. Y ahora «ni siquiera nos responden las llamadas de teléfono», claman. «No observamos ninguna intención por parte de la consejera de comenzar a saldar la deuda histórica que el Gobierno mantiene con los subalternos de Educación; está visto que no somos una prioridad en su agenda», protesta.

Por ello, la plataforma ha decidido reiniciar las movilizaciones. «Sabemos, por experiencia, que si permanecemos quietos nuestras reivindicaciones caerán en el olvido y las prioridades de nuestros dirigentes políticos seguirán siendo otras», aseguran.